(NOTICIA EMBARGADA HASTA EL PROXIMO 18 DE MAYO)

MADRID
SERVIMEDIA

Conseguir un desarrollo sostenible que compagine el crecimiento económco de los países menos industrializados con el respeto al medio ambiente requerirá una inversión anual superior a los 7 billones de pesetas hasta el final del siglo, según el "Informe sobre el desarrollo mundial 1992" elaborado por el Banco Mundial.

El documento explica que las mayores inversiones y las actividades de mantenimiento relacionadas con el medio ambiente correrán a cargo de las empresas, y los costos adicionales repercutirán en los precios que pagarán los consumidores.

El Banco Mundia advierte que los países industrializados deben soportar la mayor parte de los costos que son necesarios para hacer frente a los problemas ambientales de índole mundial, ya que son los principales causantes del cambio climático y la destrucción de la capa de ozono.

Para canalizar esas inversiones, habrá que crear mecanismos financieros que gestionen los fondos teniendo en cuenta "el bienestar mundial" y no "la satisfacción de las necesidades nacionales".

El informe señala que durante los próximosaños es prioritario solucionar la situación de los cerca de 1.000 millones de personas que carecen de suministro de agua potable y de los 1.300 millones expuestos al riesgo de respirar el hollín y el humo del aire de las ciudades.

La escasa o nula potabilidad del agua en numerosas aéreas del planeta es uno de los principales factores que contribuye a los 90 millones de casos anuales de enfermedades diarréicas, que causan la muerte de más de 3 millones de niños, la mayoría de las cuales son evitables cn la instalación de las infraestructuras adecaudas.

La contaminación atmosférica es otro de los factores de mortandad más importante, ya que algunas estimaciones sostienen que si los Estados respetaran las normas sobre emisión de partículas en suspensión, podrían salvarse cada año entre 300.000 y 700.000 vidas.

Además, entre 300 y 700 millones de mujeres y niños están expuestos a altas dosis de contaminación del aire que respiran por concinar usando combustibles inadecuados, a lo que hay que añadr los cientos de millones de agricultores, habitantes de bosques y poblaciones indígenas cuya supervivencia depende, según el Banco Mundial, de una acertada gestión del medio ambiente.

El documento asegura que en la ciudad de México es posible que la exposición al plomo sea culpable de hasta un 20 por ciento de la incidencia de la hipertensión y advierte que la acumulación en la atmósfera de los denominados gases invernadero, especialmente el dióxido de carbono, elevará las temperaturas medias del plaeta.

Sin embargo, matiza que los costos necesarios para solucionar los problemas que creará el cambio climático no serán iguales en todas las naciones, ya que la importancia de la agricultura, el sector económico más sensible a esta circunstancia, tampoco es la misma.

Respecto a la erosión del suelo, destaca que puede dañar la infraestructura económica de los países y advierte del impacto que provoca en algunas zonas de regadío la salinización y el anegamiento.

AUMENTO POBLACIONAL

A todos sos problemas agrega el incremento que experimentará la población mundial durante los próximo años, que es posible que crezca en 3.700 millones de personas en el periodo de tiempo comprendido entre 1990 y el 2030.

Para el Banco Mundial, "los pobres son tanto las víctimas como los agentes del deterioro ambiental", puesto que "el rápido crecimiento de la población puede exarcebar los efectos de la pobreza y el deterioro ambiental, que se refuerzan mutuamente".

Maritta Koch-Weser, co-autora del infome y jefe de División del Banco Mundial, considera que una "mejor educación" de las niñas en Africa y otras áreas deprimidas del mundo puede contribuir a solucionar este problema.

No obstante, Koch-Weser cree que el producto interior bruto de los países en vías de desarrollo aumentará entre un 4 y un 5 por ciento al año entre 1990 y el 2030, mientras que en los países industrializados se triplicará en el mismo periodo de tiempo.

"Si la contaminación del medio ambiente", señaló en una rueda de presa ofrecida en Madrid con motivo de la presentación del documento, "aumentara al mismo ritmo, el resultado sería un deterioro atroz del medio ambiente. Decenas de millones de personas morirían cada año por estas causas".

El Banco Mundial insiste en que es posible producir más contaminando menos si aumentan las inversiones en nuevos equipos, los Estados desarrollados transfieren tecnologías a los más pobres, mejora la gestión de las empresas estatales y los organismo públicos se hacen responsables de ls daños que causan al medio ambiente.

A su juicio, el cambio al gas natural y la aplicación de técnicas no contaminantes para el uso del carbón pueden reducir las emisiones de partículas y CO2 en un 99,9 por ciento y las de dióxido de azufre y óxidos de nitrógeno en más del 90 por ciento.

Además, apoya la utilización de energías renovables, especialmente la solar, y recuerda que los costos unitarios de producción de células fotovoltaicas y sistemas de energía térmica solar han bajado en un 95 porciento en 20 años.

El informe será presentado ante la Conferencia de Naciones Unidas para el Medio Ambiente y el Desarrollo que se celebrará el próximo mes de junio en Río de Janeiro (Brasil).

(SERVIMEDIA)
13 Mayo 1992
GJA