Esta cuota duplica la de 1995, cuando cazaron 218 ballenas, a pesar de que la población de ballena "minke" fue clasificada como stock protegido por la Comisión Ballenera Internacional (CBI) en 1986.

Aunque en 1992 el Comité Científico de la CBI aceptó una estimación de la población realizada por Noruega en 1992, posteriormente reconoció que la cifra era errónea, por lo que en la actualidad no existen datos fiables al respecto.

El año pasado, la CBI aprobó una resolución pidiendo a Noruega que suspendiese inmediatamente toda actividad ballenera bajo su jurisdicción, pero el Gobierno nórdico noha atendido la solicitud.

Ante esta actidud, organizaciones ecologistas de ámbito internacional, como Greenpeace y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), han acusado a las autoridades noruegas de desafiar a la autoridad de la CBI y poner en peligro la supervivencia de esta especie.

El reinicio de la caza comercial de ballenas por parte de la flota nórdica se produce poco antes de que se celebre la asamblea anual de la CBI, que se reunirá en la localidad escocesa de Aberdeen el próximo mes de unio.