(NO DAR) LAS OBRAS IMPULSADAS POR BONO EN LOS SÓTANOS DEL CONGRESO SE PARALIZAN PARCIALMENTE TRAS EL HALLAZGO DE UN OSARIO
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Las obras que se llevan a cabo en los sótanos del Congreso de los Diputados desde la llegada de José Bono a la Presidencia de la Cámara se han paralizado parcialmente tras el hallazgo, ayer, de un osario del que se extrajeron restos de dos cadáveres para su datación y posible investigación.
Los trabajos que se realizan en los bajos del Palacio de la Cortes están muy avanzados y en estos meses han deparado más de una sorpresa. Durante las excavaciones se descubrió una gran tinaja sobre cuya utilidad ha habido muchas especulaciones y que cuando terminen las obras quedará protegida en un vitrina que permitirá su contemplación.
El hallazgo de los huesos no ha sorprendido en la Cámara Baja, habida cuenta de que el edificio fue levantado sobre el antiguo convento del Espíritu Santo, que sufrió importantísimos destrozos a consecuencia de un incendio ocurrido en 1823.
Una de las leyendas en torno a la historia del edificio del Palacio del Congreso cuenta que ese convento del Espíritu Santo estaba comunicado con el de Santa Ana, ubicado en la plaza que aún lleva ese mismo nombre, a través de un túnel subterráneo.
Con la instauración del régimen liberal en 1834, el gobierno moderado de Martínez de la Rosa eligió la iglesia de este convento para reunirse de manera provisional, puesto que estaba en desuso desde el incendio.
En 1837, cuando los progresistas accedieron al poder, decidieron la construcción de un nuevo edificio. Isabel II ponía la primera piedra del nuevo edificio el 10 de octubre de 1843.
El arquitecto autor del proyecto fue Narciso Pascual y Colomer, que había ganado el concurso convocado por la Academia de Artes de San Fernando. Tras siete años de obras, que obligaron a los diputados a reunirse en el salón de Baile del Teatro Real, la Cámara Baja fue inaugurada el 31 de octubre de 1850.
AMPLIACIONES
Durante los años 80 del siglo XX, las dependencias del Congreso tuvieron su primera ampliación. Sobre la manzana contigua se construyó un edificio que comunica con el Palacio mediante un puente sobre la calle de Floridablanca, conocido popularmente como Puente de los Suspiros.
Este edificio, situado en donde estuvo el Hospital de Italianos (1598-1885), fue inaugurado por los Reyes el 28 de mayo de 1980. Catorce años después, en 1994, se inauguró una nueva reforma y ampliación del edificio.
La tercera y cuarta ampliación concluyó el 1 de junio de 2006 sobre las antiguas sedes de dos entidades bancarias, el Banco Exterior de España y el Banco de Crédito Local.
Ahora se llevan a cabo nuevas obras de rehabilitación, en la zona del subsuelo a la que se accede por una de sus puertas posteriores. Bono ha sido el más decidido impulsor de esta reforma que permitirá a los diputados y al propio presidente de la Cámara acceder al Palacio de la Cortes sin recorrer el patio descubierto en que los periodistas suelen hacer guardia.
Los dos leones que custodian la entrada principal del Congreso de los Diputados fueron un encargo de Isabel II y esculpidos en la Fundición de la Artillería de Sevilla en 1866 por Ponciano Ponzano, quien realizó la obra con el bronce fundido de los cañones capturados al enemigo en la guerra del norte de África en 1860.
Ambos felinos se colocaron en el pórtico del Palacio del Congreso de los Diputados en 1872, según consta en los libros de la biblioteca de la Cámara Baja.
(SERVIMEDIA)
04 Feb 2009
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