Según informó hoy la compañía, la decisión de reducir la plantilla de esta planta en 1.680 puestos fue anunciada hace un mes y supone "un ajuste necesario para mantener la competitividad de estas instalaciones y asegurar su futuro sostenible".

La empresa "debe asegurar su competitividad para llegar a 2010 en la mejor posición para optar a la adjudicación de nuevos modelos", agregó.

Con este objetivo, Nissan tiene que "tomar la difícil decisión de reducir en 1.680 el número de posiciones de su Planta de Barcelona desde ahora hasta septiembre de 2009".

La prioridad de Nissan es minimizar el impacto social de esta medida, por lo que tiene previsto realizar dos ERE: el primero, una reducción de 1.288 empleados en diciembre de 2008; el segundo, una reducción de 392 empleados en septiembre de 2009.

El consejero director general de la compañía, Fumiaki Matsumoto, aseguró hoy que: "realizaremos estos cambios intentando minimizar su impacto social". Añadió que, "en las condiciones actuales del mercado, estos ajustes servirán para posicionar mejor a la compañía en un entorno de mercado muy complicado".