La iniciativa parte de do empresas privadas, Lego y El Corte Inglés, que han contado con la colaboración del Ayuntamiento de Madrid.

La torre deberá alcanzar más de 22 metros de altura para batir el récord recogido en el libro Guinness, que está en posesión de los niños de Hong-kong, que el pasado mes de abril superaron los 21,96 metros.

Los niños que quieran participan deberán adquirir por un precio de 100 pesetas las bolsitas que contienen los ladrillos de juguete. La recaudación irá destinada a programas de ayuda a lo niños de Ruanda.

El día 7 de octubre Jesús Jáuregui, coordinador general de la campaña para Ruanda de Cáritas, colocará el priemer ladrillo. El día 9 por la tarde se organizará una gran fiesta animada por Teresa Rabal, que alentará al público a colocar los últimos ladrillos de la torre.