Don Juan Carlos y doña Soía, que se encuentran en Palma de Mallorca disfrutando de sus vacaciones de Semana Santa, asistieron a las regatas del XXX Trofeo Su Alteza Real Princesa Sofía acompañados por el pequeño Felipe Juan, que se ha quedado con sus abuelos, mientras sus padres viajaban a Filipinas.

El hijo de los duques de Lugo vivió la primera regata de su vida junto a sus abuelos, quienes en todo momento se mostraron especialmente felices con el niño.

El pequeño, vestido con un jersey de lana color blanco, pantalonesvaqueros y un gorro rojo también de lana, se convirtió en el auténtico protagonista de estas jornadas marineras.