La realización de este plan significa el enlace de los principales polígonos industriales d ambas comunidades. Su finalidad es propiciar un desarrollo armónico del área y mejorar la red de comunicaciones con vistas a la implantación del mercado único, afirmaron las mismas fuentes.

El consejero de Obras Públicas, Transportes y Comunicaciones del Gobierno de Navarra, Antonio Aragón, firmó hoy las órdenes forales de adjudicación de obras.

La empresa Harinsa ejecutará el tramo comprendido entre los kilómetros 0 y 8, por 337 millones de pesetas, mientras que Asfaltos-Euroasfaltos-Alcer remoelará los kilómetros 8 al 16, por un importe de 413 millones. En ambos casos se ha establecido un plazo de seis meses para la conclusión de las trabajos.

Estos dos proyectos se suman al conjunto de acciones programadas por el Departamento de Obras Públicas, Transportes y Comunicaciones del Gobierno de Navarra en el Eje del Ebro, que suponen una inversión superior a los 3.000 millones de pesetas.

"Este eje, que recorre la parte suroeste de la comunidad foral, fue considerado como un itinerario imprtante dentro de la articulación de las redes de interés nacional, al mismo tiempo que se entiende como un pilar indispensable para el desarrollo industrial y económico en su zona de dominio", afirmaron a esta agencia representantes de la diputación navarra.

La longitud total de las obras contempladas en estos dos proyectos es de 16 kilómetros, que tendrán la misma anchura de plataforma que el resto del eje, es decir, 11 metros, repartidos en dos carriles de 3,5 y arcenes laterales de 1,5, con bermas e 0,5 metros.

El comienzo de la carretera se ajusta a la actual en el límite de Navarra con la Rioja, tanto en calzada como en alzado y alineaciones.

En los puntos de coincidencia de ese tramo con las carreteras de Viana y Los Arcos, se han diseñado intersecciones en forma de T. De este modo, la entrada desde Mendavia y la salida hacia Logroño cuentan con vías de deceleración y aceleración.