Este es el primer resultado de la Ley de Conciliación de la Vida Familiar y Laboral, que entró en vigor a finales de 1999, y que permite a los hombres acceder al permiso de maternidad a partir de las seis semanas de la fecha del parto, mientrasque antes sólo podían hacerlo a partir de la duodécima semana.

Los 180.623 permisos de maternidad concedidos entre enero y noviembre del 2000 suponen, además, un incremento del 16,3% en el número de estas prestaciones respecto a los mismos datos de 1999, cuando habían disfrutado de este permiso 155.256 madres.

Esto significa que, hasta noviembre de 2000, se registraron 25.367 bajas de maternidad más entre las asalariadas españolas que las que hubo en 1999, a un ritmo de 16.400 bajas mensuales durnte el año pasado, por las 14.000 de 1999.

En virtud de estas bajas, la Seguridad Social dedicó más de 100.000 millones de pesetas al pago de los correspondientes subsidios por maternidad, dado que las arcas públicas abonan el 100% del salario durante las 16 semanas que dura el permiso.

Esta prestación económica de la Seguridad Social protege las situaciones de maternidad, adopción y acogimiento, tanto preadoptivo como permanente, durante los periodos de cuidado del bebé. El requisito para accede a la prestación es estar cotizando en el momento de la baja y haber cotizado un mínimo de 180 días (seis meses) en los cinco años inmediatamente anteriores al parto o adopción.