La Consejería de Educación emitirá en los próximos días una orden, en la que se contempla la libertad de actuación en cada uno de los centros públicos escolares de las islas.

En un comunicado emitido hoy, los nacionalistas consideran que "esta decisión hace prácticamente imposible ningún avance en la normalización linguística balear".

Los partidos de la oposición propusieron durante el último periodo parlamentario la redacción de un texto legal que obligue a la enseñanza en catalán siguiendo el odelo de la comunidad de Cataluña.

No en vano, y, según un reciente estudio elaborado por la Universitat Catalana d'Estiu, publicado ayer por el diario La Vanguardia, el idioma catalán se emplea más en las islas (75,2 por ciento de la población) que en la propia Cataluña (72,1 por ciento).

La línea política iniciada por el Gobierno Balear en materia de normalización linguística ha cambiado sustancialmente en los dos últimos años, coincidiendo con el cese como consejera de cultura, de María Antoni Munar (presidenta de Unión Mallorquina), y el nombramiento de Bartomeu Rotger, afín al PP.

Munar diseñó un modelo educativo que contemplaba "el desarrollo de la lengua catalana en los centros escolares no universitarios". Esta propuesta, paralela al desarrollo de la antigua LOGSE, proponía el aprendizaje de tres idiomas al mismo tiempo en el primer ciclo: castellano, catalán y francés, inglés o alemán.

No obstante, tras la ruptura del pacto entre PP y UM, este informe ha sido sustituído por el panteamiento del nuevo conseller, "más moderado y en la línea de preferencia del castellano por encima de otras lenguas, como defiende el PP nacional", señaló a Servimedia un portavoz nacionalista.