La ‘Comunidad Por Talento Joven’ pretende constituirse en el lugar de asesoramiento para las personas más cercanas a los jóvenes con discapacidad y, para ello, ofrece recursos útiles, contenidos y cursos de formación tanto para las familias como para los profesionales, con el fin de ayudarles a romper prejuicios y barreras y eliminar la sobreprotección que, en muchas ocasiones, ejercen sobre los jóvenes con discapacidad.

Cofinanciada por el Fondo Social Europeo, la ‘Comunidad Por Talento Joven’ se materializa en un espacio de conexión. El primero ofrece contenidos de valor, incluyendo conocimiento, herramientas y metodologías, a los jóvenes con discapacidad, a sus familias y a los profesionales que los atienden, como son los sanitarios, profesores y orientadores. Así, la comunidad virtual cuenta con una serie de cursos enfocados a dotar de recursos, estrategias, iniciativas, pautas y testimonios que contribuyen a facilitar los procesos de inclusión laboral.

El sitio web tiene tres apartados, en función de los destinatarios, para los jóvenes, las familias y para el tercer sector de la discapacidad y los profesionales sociosanitarios, profesores y orientadores y los contenidos formativos están adaptados a cada uno de los destinatarios.

Entre los cursos dedicados a las familias figura el que lleva por título ‘La etapa de la enseñanza obligatoria termina, ¿y ahora qué?’, en el que se tratarán temas como los roles de la vida joven, incluyendo trabajo, relaciones y vida independiente; la importancia de generar expectativas positivas y viables ante el mundo laboral; recursos a disposición de las familias; beneficios de la vida laboral; beneficios personales, incluyendo vida activa, relaciones, autoestima; beneficios para la familia, incluyendo autonomía personal y gestión del tiempo; cómo ir preparando un clima en familia para que se desee trabajar; los hermanos como colaboradores necesarios en el proyecto laboral y la herencia negativa de la sobreprotección.

En cuanto a la formación para al tercer sector y los profesionales, se impartirán cursos como el que responde al título de ‘La transformación de las entidades: de las necesidades colectivas a las necesidades personales’, en el que se abordarán aspectos como las técnicas y herramientas para mejorar las habilidades personales y directivas; las buenas prácticas de intervención con jóvenes; la transformación digital en las organizaciones y la toma de decisiones.

Ejemplo de cursos dirigidos a los profesionales es el de emprendimiento para sociosanitarios, profesores y orientadores titulado ‘¡Tengo una idea! ¿Y si cambia la vida de una persona?’, que versará sobre temas como la era del talento y del emprendimiento; las ideas de negocio, tendencias y necesidades sociales; la creatividad; las buenas prácticas de emprendimiento social y las herramientas de análisis.

La ‘Comunidad Por Talento Joven’ nace para aportar la seguridad que todo ser humano necesita a la hora de afrontar cualquier mínimo reto que implique explorar nuevos escenarios y, a este respecto, el coordinador del proyecto Alianza con el Talento, Álvaro Galán, subrayó que la “falta de seguridad es uno de los elementos clave que puede haber detrás de la brecha de 7,8 puntos existente entre los jóvenes sin discapacidad que, nada más terminar su etapa de formación se ponen oficialmente a buscar activamente empleo, y los jóvenes con discapacidad que, en la misma situación, no lo hacen”. “Si conseguimos reducir esta brecha, la iniciativa será un gran éxito”, añadió.

CAMPAÑA

La ‘Comunidad Por Talento Joven’ se completa con una campaña de comunicación que tiene como fin “activar” a los jóvenes con discapacidad hacia el empleo y “neutralizar” los posibles prejuicios y barreras que les impiden hacerlo y que, en muchos casos, provienen de su círculo más cercano, entendiendo como tal familiares y profesionales que les prestan apoyo.

Cuenta con tres piezas audiovisuales que muestran a tres jóvenes con discapacidad en activo en el mundo laboral. Se trata de tres claros ejemplos en los que la fuerza empoderadora ha vencido las creencias paralizantes y el primero, Rafa Benítez, es jugador profesional del equipo de baloncesto en silla de ruedas, UNES Barça; el segundo, Diego Soliveres, es diseñador de zapatillas de deporte con una discapacidad visual y uno de los socios de la marca Timpers y Núria Figueras, la tercera, es diseñadora gráfica en La Casa de Carlota donde el hecho de ser una persona con autismo no le ha supuesto un freno para convertirse en una buena profesional, con la ayuda de su tutora, Inge Nouws.

PRESENTACIÓN

En el transcurso de la presentación de esta iniciativa, el vicepresidente ejecutivo de Fundación ONCE, Alberto Durán, hizo hincapié en la importancia de ofrecer “instrumentos y metodologías” para “crear ese estado de conciencia colectivo” de que la persona con discapacidad “no está sola”.

“Hay otra gente que está contigo también en ese camino al borde del precipicio y, entre todos, tenemos que conseguir que transitemos el camino sin caernos”. “Y, si nos caemos, nos vamos a volver a levantar tantas veces como las que nos caigamos”, abundó, convencido de que “esto es lo que propone esta ‘Comunidad Por Talento Joven” y de la importancia de que las personas con discapacidad no caminen “solas y nunca paradas, nunca acomodadas”.

“Si tenemos los apoyos y gente al lado que nos anime y ayude, seguro que nos levantaremos y estaremos preparados para volver a caernos y llegar a vivir una vida que no va a ser fácil, pero que va a ser una vida en la que sintamos satisfacción”, resolvió.

A continuación, tuvo lugar una mesa redonda centrada en la influencia que tienen las personas que forman parte del entorno del joven con discapacidad en su inclusión en el mercado laboral, que fue moderada por la directora de Formación, Empleo, Operaciones y Convenios de Fundación ONCE y directora general de Inserta Empleo, Sabina Lobato, quien dijo “confiar” en que la iniciativa sea “realmente ese instrumento que pueda acompañar a muchos padres, jóvenes y profesionales para conseguir el objetivo de que todos tengan su proyecto de vida y puedan tomar sus propias decisiones”.

En dicha mesa participó el exseleccionador nacional de futbol Vicente del Bosque, padre de un joven con discapacidad, quien reconoció que las familias de estas personas se encuentran en una “situación que no esperas nunca”. “Vas preparándote para ir tomando las mejores decisiones posibles hasta que llega la interacción laboral”, admitió, para afirmar que, en el caso de su familia, “ha significado un camino que, en algunos casos, se ha recorrido sin tener mucha idea de lo que se hacía, pero sí con la buena voluntad y apoyados por profesionales”.

Por su parte, la activista y madre de un niño con discapacidad Mónica Estacio subrayó que su familia lucha “por la inclusión plena en todos los aspectos”. “No es sencillo, no es fácil mandarle al cole cada día”, afirmó, para recordar que no se trata “solo de preparar a las personas con discapacidad, sino que hay que luchar mucho con la sociedad” y reconocer que, ante el futuro de su hijo, siente “vértigo, pero también esperanza”.

En la misma línea, el joven emprendedor y jugador profesional de baloncesto de UNES Barça con discapacidad física Rafa Benítez aseguró que el mundo laboral no le da “pánico o vértigo”. “Porque las personas con discapacidad podemos adaptarnos perfectamente a un mundo laboral en el que, a día de hoy, nos podemos dirigir hacia nuestros gustos y necesidades a la vez”, concluyó.

La psicóloga Cecilia Simón, especializada en psicología evolutiva y de la educación, defendió que la educación inclusiva “es un derecho y es fundamental cuando hablamos de empoderamiento de las personas”, convencida de la importancia de la “inclusión a lo largo de toda la vida, con los apoyos, ayudas y ajustes necesarios” y de que “no podemos perder talentos”, entre otras cuestiones porque “la inclusión y la diversidad beneficia a todas las personas”.

Finalmente, la psicóloga coach Isabel Aranda lamentó que, en ocasiones, la familia de un joven con discapacidad supone un “freno tremendo a su propio sentido de valía”, al “configurar una realidad restrictiva para un niño y adolescente que tiene una discapacidad, pero también el derecho a su propio proyecto de vida”.

El acto lo cerró el director general de los Derechos de las Personas con Discapacidad del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, Jesús Martín Blanco, quien dio su “enhorabuena” a Fundación ONCE por impulsar esta iniciativa, consciente de la idoneidad de “aplaudir mecanismos como este, que aceleran la igualdad y apuestan por la convivencia para que nadie ni nada deba generar discriminación en nuestro día a día”.

A su juicio, un Gobierno “decente no puede permanecer impasible a la discriminación”. “Tiene que ser proactivo e innovador para que nadie se quede atrás, porque el progreso de un país también debe medirse en términos de derechos sociales”, apostilló, convencido de que, “para ello necesitamos el talento de todas las personas, sin excepciones”.

En este punto, avanzó que “en las próximas semanas” su departamento publicará el nuevo Programa Reina Letizia para la Inclusión, iniciativa del Real Patronato sobre Discapacidad que en esta edición se ha “mejorado sustancialmente” y que este año ha vuelto a incrementar su dotación presupuestaria, que alcanzará los 5,5 millones de euros.

Por último, lanzó un mensaje a las fuerzas políticas para que “desbloqueen” la reforma del artículo 49 de la Constitución “de una vez por todas”, al tiempo que puntualizó que "no es un capricho de este Gobierno", sino que "responde a una demanda legitima" del sector, además de "al consenso parlamentario de la pasada legislatura y a respetar la legalidad vigente que recoge la Convención internacional sobre los derechos de las personas con discapacidad”. “Se trata de si España nos ve como disminuidos o nos ve como personas”, concluyó.