"El museo se cerró a las 11.30, como estaba previsto, y se abrió a las 13.15 horas. El seguimiento ha sido muy alto, alrededor del 70 ó 75 por ciento de la plantilla. El paro se h realizado fundamentalmente en contra de la congelación salarial, pero el seguimiento ha sido tan alto por el malestar interno de los trabajadores del museo", explicó Solano.

El representante de los trabajadores indicó que no se han producido incidentes ni protestas entre los visitantes que acudieron hoy al museo. "Antes de entrar les hemos informado del paro. Además, la entrada era válida para visitar de nuevo las salas una vez finalizado el paro", dijo Solano.

"El público, incluidos los turista extranjeros, se lo han tomado con total filosofía. A las 11.30 horas sonaron los timbres que anunciaban el desalojo del museo y un cuarto de hora más tarde ya estaba todo el mundo fuera", añadió el presidente del comité de empresa.

La versión de Solano sobre el desarrollo del paro coincidió con la ofrecida desde la dirección del Museo del Prado, que destacó la buena disposición mostrada por los visitantes de la pinacoteca, aunque las fuentes consultadas optaron por no cuantificar el seguimiento del pro.