Se trata de un género muy cultivado por los maestros flamencos a lo largo del siglo XVII, que representan en sus obras interiores de casas o palacios, adornados con pinturas y objetos preciosos, en el momento de ser visitados por sus dueños u otros personajes de la época.

La pintura de gabinete se desarrolló casi exclusivamente en la localidad de Amberes y sus máximos creadores y exponentes son Teniers y Brueghel, aludidos en el título de la muestra, además de Frans Francken, Tilborch, Gonzales Coques y Biset, de quienes también se incluyen algunos de sus trabajos más representativos.

La exposición se centra en torno al cuadro titulado "La Galería de Pinturas del Archiduque Leopoldo Guillermo", pintado por Teniers, el Joven, que fue regalado por el archiduque Alberto l rey Felipe IV, y "El Gabinete de Cornelis van del Geest", de William van Haecht, probablemente la obra más famosa de este género.

Como complemento, también se presentan algunas de las pinturas originales que aparecen reproducidas dentro de los cuadros de gabinete, como es el caso de "Venus y Adonis", de Tiziano, que se conserva en el propio Museo del Prado.

En la muestra se incluyen también cuatro "pastiches" o copias hechas por Teniers de los mejores cuadros italianos del archiduque Leopoldo Gillermo, que sirvieron de modelo para los grabados del "Theatrum Pictorum", el primer catálogo ilustrado de una colección.

Matías Díaz Padrón es el comisario de esta muestra, patrocinada por la Fundación Amigos del Museo del Prado, que permanecerá abierta hasta principios del próximo mes de mayo, coincidiendo con la reapertura de las cinco salas que antes correspondían a los primitivos flamencos.

FRANCESES E ITALIANOS

Las dependencias recuperadas después de un proceso de restauración y acondicinamiento albergarán, a partir de ahora, una selección de pinturas de las escuelas francesa e italiana del siglos XVII, pertenecientes a la colección permanente del museo.

En lo que se refiere a los cuadros italianos, corresponden al Realismo y al Clasicismo, las dos grandes corrientes del barroco, representadas por Carvaggio, Serodine y Gentileschi, la primera, y por Carraci, Albani, Domenichino y Reni, la segunda.

De los artistas franceses del siglos XVII, mucho menos representados en las coleccones del museo, se exponen pinturas de Valentin, Tournier, Vouet y Lorena, trasladados a Italia todos ellos, y de Bourdon y Mignard, que desarrollaron su carrera en la Corte francesa.

Las dos piezas más importantes de estas nuevas dependencias serán el "David vencedor de Goliat", original de Caravaggio, y el "Músico ciego tocando la zampoña", de Georges de La Tour, recientemente adquirido por el Prado.