Las Cortes de Castillay León dieron el visto bueno a la Ley en el último pleno del anterior período de sesiones, tras lo cual el texto fue publicado en el Boletín Oficial de la Comunidad Autónoma el 28 de julio y hoy entra en vigor.

La Ley contempla sanciones de hasta 250.000 pesetas por falta leve para los comercios que superen las 72 horas de apertura a la semana establecidos en el decreto de horarios, o aquellos que no exhiban en sus escaparates un cartel con su horario de atención al público.

Como falta grave, sanionada con multas entre 250.001 pesetas y 2,5 millones, se contempla la apertura en domingos y festivos fuera de los 8 anuales que exceptúa el decreto.

En caso de falta muy grave (reincidencia de falta grave en el plazo de un año), la Junta prevé multas de entre 2,5 y 25 millones, e incluso sanciones accesorias, como el cierre del establecimiento.

De este régimen general, la ley exceptúa los llamados "establecimientos de conveniencia", dedicados a la venta de pan, pastelería, frutos secos o helads, entre otros.