Según el equipo médico que le atiende, la mujer sufre una "sintomatología delirante paranoide" y asegura que asesinó a su bebé para salvarle de los "monstruos de Internet".

Schmitt, de 38 años y de nacionalidad austriaca, asestó el pasado lunes por a noche 7 puñaladas penetrantes y dos cortes superficiales a su hijo de 8 meses, según los datos de la autopsia realizada ayer.

Los hechos ocurrieron en un hotel de la zona turística de Santa Ponsa, propiedad del marido de Elisabeth. La mujer sufría depresiones y ya había sido atendida por un psiquiatra. Recientemente había dejado de tomar la medicación con la que se trataba. Tras matar al pequeño, Elisabeth intentó suicidarse.

Según confirmaron hoy fuentes del Hospital Son Dureta, la mujer permaece en observación, a la espera de que el equipo de psiquiatras que le atiende adopte una decisión definitiva. Estas mismas fuentes aseguraron que lo más probable es que sea ingresada en el psiquiátrico, dado el cuadro médico delirante que presenta.

El psiquiatra que ayer la examinó, Miguel Lázaro, relató que la mujer "tenía miedo de que a su hijo le pasase algo" y que ella "se sentía perseguida y controlada".

Elisabeth Schmitt está casada con un empresario hotelero mallorquín, José María Palou, e 68 años. Según fuentes cercanas a la investigación, se trata de un matrimonio normal y aunque eran conocidos los problemas mentales de la mujer, nada hacía presagiar lo sucedido. El caso está en manos del Juzgado de Instrucción número 9 de Palma de Mallorca.