LA MUJER ASESINADA POR SU COMPAÑERO EN CADIZ FUE ENTERRADA ESTE MEDIODIA

CADIZ
SERVIMEDIA

Los restos de María del Carmen Botubot Otelo, asesinada el pasado sábado por dos disparos que salieron del arma de su ex compañer sentimental, el guardia jurado Francisco Sánchez Trujillo, recibieron sepultura este mediodía en el cementerio jardín de Puerto Real, en Cádiz.

Al acto acudieron sólo los familiares y amigos íntimos de la víctima (que tenía dos hijos con su asesino, del que llevaba separada dos años) y durante el mismo no se produjeron incidentes.

Francisco Sánchez continúa ingresado en la UCI del Hospital Puerta del Mar en Cádiz a causa de las heridas que él mismo se provocó cuando se disparó con su revólver. Según vecinos de la fallecida consultados por Servimedia, Francisco Sánchez tenía un carácter violento y había sido denunciado varias veces por su ex compañera por malos tratos y violación.

El homicida había trabajado en Astilleros Españoles, en donde causó baja incentivada que le reportó una indemnización de ocho millones de pesetas e ingresó posteriormente en una empresa de seguridad, que le proporcionó el revólver del calibre 38 con el que disparó a la víctima.

Según los testigos, el sábadopasó por la casa de María del Carmen para recoger a sus hijos, de 4 y 9 años de edad, y dar con ellos un paseo. Al poco de salir, volvió, golpeando con fuerza la puerta del inmueble de donde había salido y, acto seguido, se escucharon dos disparos, que alcanzaron a la mujer en la cabeza y en el tronco.

UNA HERMANA HERIDA

En el mismo inmueble, sito en la avenida del Guadalquivir, vivían dos hermanas de María del Carmen. Una de ellas, Etelvina Botubot, de 16 años, se asomó a una ventana pidiendo auxilo y recibió un disparo en el brazo de pronóstico grave. La otra, Elvira, sufrió un ataque de nervios y perdió el conocimiento.

Poco después, Francisco Sánchez se disparó en la cabeza, aunque la bala sólo le rozó. Cuando fue detenido, salió por su propio pie escoltado por la policía.

Vecinos del lugar se concentraron en la zona con la intención de linchar al agresor, llegando incluso a zarandear el coche de la policía que intentaba llevarlo a comisaría.

La vivienda de la fallecida forma partede un grupo de varios edificios de tipo social conocidos popularmente como Puerto III, por su semejanza con los centros penitenciarios Puerto I y Puerto II de El Puerto de Santa María, en Cádiz.

(SERVIMEDIA)
03 Ago 1992
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