MUGICA DICE QUE EL PACTO DE ESTELLA "ESTA SIENDO RATIFICADO"
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El nuevo Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, dijo hoy que "la defensa de los derechos de los ciudadanos implica la defensa de quienes son mancillados, amenazados, humillados, secuestrados, extorsionados e incluso asesinados por un sector nacionalista radical que está en complicidad con otro sector, que no es ayoritario ya en el País Vasco y que simplemente está vinculado a ese sector radical, al brazo político de la banda criminal, en un compromiso llamado Estella, que está en suspenso, pero que está siendo ratificado".
El futuro Defensor del Pueblo reconoció en la Ser que está "esperanzado" sobre la resolución de los problemas del País Vasco, porque aunque "la situación es mala, dramática", "por primera vez desde hace años, a pesar de los asesinatos, de esa 'kale borroka', de ese terrorismo de baja intenidad, a pesar de las amenazas permanentes a concejales, a pesar de todo hay una rebelión de la sociedad vasca para exigir libertad y vida".
Destacó que esta rebelión se percibe especialmente en "la rebelión de los intelectuales. No pasa el día sin que en la prensa los intelectuales vascos alcen su voz combatiendo la mitología pseudohistórica fabricada en el siglo XIX. Los intelectuales abren la vía, como hicieron los enciclopedistas, y eso produce esperanzas para que el País Vasco recupere el tino demcrático".
Sobre la situación actual del PSOE, Múgica señaló que "lo veo atravesando un desierto", y agregó que el partido necesita un líder para dirigir esta travesía.
A su juicio, ese líder "tiene que ser un 'primus inter pares', no puede ser prepotente y arrogante, no puede ser monologante, tiene que dialogar, que tener sentido de la solidaridad, de la pasión por los humildes, de los quebrantados, por los humillados; tiene que tener sentido de la doctrina de la teoría de las ideas, como instrumnto para moverse en la realidad siempre cambiante; esas son las cualidades del líder".
Preguntado sobre su abandono de la militancia socialista para tomar posesión de su nuevo cargo, explicó que se trata de un imperativo legal: "Yo soy de convicción socialista y no voy a ser un socialista estampillado. Yo sigo siendo un moderado de izquierda y un socialista prudente".
Por otro lado, Múgica indicó que el Defensor del Pueblo "no tiene poder, pero puede ejercer las recomendaciones tras recibir las qejas o supervisar la Administración". Además, destacó la potestad de esta institución para interponer ante el Tribunal Constitucional recursos de inconstitucionalidad contra algunas leyes aprobadas.
Agregó que para el Defensor del Pueblo es importante suscitar "una corriente atractiva entre los ciudadanos para que éstos recurran a él y para que las quejas y las críticas (...) lleguen hasta él".
(SERVIMEDIA)
14 Jun 2000
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