"En ese mismo recinto está enterrada también Victoria Eugnia, que no fue reina tampoco. Don Juan puede considerarse con toda legitimidad que se trata de un eslabón indispensable en la sucesión dinástica española", afirmó Balansó.

A continuación, recordó que durante un tiempo de la larga enfermedad que ha aquejado a Don Juan, se especuló con la conveniencia de que fuese inhumado en la Abadía de Poblet o en el Pabellón de Infantes de El Escorial, pero en su opinión ninguno de esos dos emplazamientos sería apropiado, dado que es hijo de rey y padre de rey y nohay ninguna norma que impida que su tumba esté en el Panteón Real.

Balansó rememoró también a lo largo de su intervención que Don Juan era una persona muy abierta y atenta hacia todo el mundo. "Su hijo, don Juan Carlos siempre fue más tímido, pero ha ido aprendiendo a través del ejemplo de Don Juan", rememoró el historiador, quien también señaló que el padre era más emotivo y propenso a la lágrima que su hijo, el actual rey.

Por último, explicó que el motivo principal por el que Don Juan nunca llgó a reinar en España fue su negativa a someterse a las directrices que Franco le imponía y por la diferencia de criterios entre ambos acerca de la necesidad de que la corona reinase sobre todos los españoles, vencedores y vencidos de la Guerra Civil.