El accidente se produjo inmediatamente después del despegue del aparato, de fabricación rusa, al caer éste al suelo y prenderse fuego. Cinco tripulantes murieron calcinados y otros cuatro, entre ellos el piloto, consiguieron escapar de las llamas. Entre los muertos figura la cocinera de la brigada, Amparo García Huerta,una mujer de doble nacionalidad española y rusa, aunque nacida en nuestro país.

La brigada rusa participó hasta ayer 30 de setiembre en la campaña anti-incendios de Aragón, encargándose del transporte en helicóptero de los guardias forestales que acuden a soforcar las llamas.

El siniestro se produjo cuando partían rumbo a Málaga para tomar desde allí un avión que les conduciría de vuelta a Rusia, según informó a Servimedia un portavoz de la base de Daroca en la que ocurrió la tragedia.

Los hridos, tres hombres y una mujer, fueron trasladados al Hospital Comarcal de Calatayud (Zaragoza). Uno de los heridos presenta fracturas costales y vertebrales, aunque no peligra su vida, según informaron a Servimedia fuentes hospitalarias.

La mujer tiene contusión facial y craneal, además de quemaduras en las manos de segundo y tercer grado. Otro herido tiene fracturas en diversos huesos, con estallido nasal.

Simón Casas, consejero de Agricultura del Gobierno aragonés, confirmó a Radio Nacional qe los accidentados componían la brigada rusa que participaba en la campaña anti-incendios en Aragón, que terminó ayer. Casas explicó que el accidente se produjo nada más despegar, a unos cincuenta metros de la plataforma de despegue.