Asimismo, la CECU considera que "las operadoras tendrían que facilitar un poco las cosas para que los niños pedan tener un teléfono móvil de juguete, que puedan recibir llamadas pero que no puedan llamar", según indicó a Servimedia Antonio López, portavoz de la asociación.

López es partidario de limitar el uso infantil de este tipo de teléfonos "por razones puramente económicas, ya que para las familias es un gasto enorme".

Asimismo, la CECU sugirió que las comunidades autónomas u otras instituciones deberían organizar campañas de sensibilización y lanzar el mensaje de que "un teléfono móvil no es un juuete".

Por su parte, la presidenta de la Confederación Española de Organizaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (CEACCU), Isabel Avila, señaló a Servimedia que la edad de 8 años es "demasiado temprana para empezar a utilizar un móvil sabiendo el coste".

RESPONSABILIDAD

"Un niño entre 8 y 13 años no tiene capacidad suficiente de discriminar las llamadas, es decir, que se puede colgar y gastar en un día 18 euros, porque no es consciente", afirmó.

La CEACCU ya alertó hace meses de ue los móviles son uno de los regalos de Reyes o de Papá Noel cada vez más frecuentes en España, especialmente entre los adolescentes.

Por otro lado, el estudio refleja que "hay una fiebre consumista desaforada en la ciudadanía española", según manifestó a Servimedia el presidente de la Confederación de Asociaciones de Vecinos, Consumidores y Usuarios de España (CAVE), Ramón Morales.

Muchos niños utilizan los teléfonos para enviarse mensajes incluso en el interior de los colegios, lo que supone, n opinión de la CAVE, "que están pagando por hablar entre ellos", mientras que su economía depende de los padres.

Morales destacó que algunos anuncios exaltan los móviles y que los niños son muy influenciables por la publicidad. Además, las ondas electromagnéticas ejercen efectos en la salud todavía no aclarados por los científicos, por lo que estos "aconsejan cautela a los padres".