Se trata de una verdadera "escultura orgánica" instalada por Jan Fabre a la entrada de la Universidad de Gante, que incluye 8.000 lonchas de jamón en progresiva descomposición. El original artista quiere atraer a todas las moscas y mosquitos posibles a fin de crear un efecto de "escultura viviente".

"El buen arte debe apestar un poquito", ha manifestado Fabre a la prensa belga, en respuesta a las críticas y las caras de repulsión de mchos visitantes y transeúntes sorprendidos que pasean desde el sábado junto a la fachada de la Universidad de Gante. "Será fantástico, con muchas moscas zumbando alrededor y gusanos arrastrándose. Entonces los pilares de jamón cobrarán vida", agregó.

La extravagante exposición, titulada "Desbordes" y que ha sido denunciada por críticos de arte y activistas en favor de los animales, cuenta con la vigilancia de una empresa de seguridad privada.