El dirigente de los Scout agregó que "el hecho de ser scout prepara a la gente a una forma u otra de liderazgo". A este respecto, citó como ejemplos al vicepresidente del Gobierno, Narcis Serra; al presidente del PP, José María Aznar, y al ex ministro de Economía y actual presidente del Grupo Parlamentario Socialista, Carlos Solchaga.

Moreillon señaló que su organización "es el único movimiento mundial que tiene como propósito la educación extraescolar de los jóvees", algo que consideró especialmente importante en la sociedad actual, ya que a su juicio los jóvenes reciben una instrucción que no les permite desarrollar su personalidad.

Así, indicó, en la familia "los padres consideran, en muchos casos, que ellos no tienen la responsabilidad de educar, sino sólo de alimentar". Por lo que se refiere a la escuela, dijo que los jóvenes "aprenden más y más, pero se les educa menos y menos", pues la necesidad de transmitir conocimientos técnicos "quita a los maestrosel afán de educar", y en el tiempo libre los jóvenes están abocados a una sociedad de consumismo.

Con respecto al lema del movimiento "Deber para con Dios, deber para con los demás, deber para consigo mismo", el secretario del Movimiento Mundial de Scout dijo que el elemento religioso es consustancial al escultismo.

Por su parte, Enrique López Viguria, presidente del Movimiento Scout Católico, declaró a Servimedia que el movimiento "es apartidista, no apolítico", ya que "educamos ciudadanos en vaores de democracia y tolerancia (...) De hecho, la gente que ha pasado por el Movimiento Scout tiene opciones muy distintas" en cuanto a partidos políticos se refiere.

Con respecto a la reunión que mantuvieron esta mañana con el líder de la oposición, José María Aznar, el presidente del Movimiento Scout Católico señaló a esta agencia que "Aznar ha entendido la importancia que puede tener este movimiento y el papel educativo que puede desarrollar".

Agregó que durante la reunión con Aznar hablaron e las medidas fiscales que se pueden tomar para que el movimiento se desarrolle, así como del uso del castellano en el escultismo, ya que no es considerado lengua oficial, y de las relaciones con América Latina.