MORALES DICE A ZAPATERO QUE BOLIVIA NACIONALIZARA SUS RECURSOS PORQUE NECESITA SOCIOS EXTRANJEROS, PERO NO "DUEÑOS"
- El Gobierno español se muestra convencido de que los intereses empresariales serán compatibles con los proyectos de Morales
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El presidente electo de Bolivia, Evo Morales, dejó claro hoy al presidente español, José Luís Rodríguez Zapatero, que su país nacionalizará sus recursos naturales porque necesita socios privados extranjeros, pero no "dueños" ni "patrones".
El propio Morales explicó, en rueda de prensa tras más de hora y media de reunión con Rodríguez Zapatero en La Moncloa, que trasladó al mandatario español su intención de que el Estado boliviano ejerza "el derecho de propiedad" sobre sus recursos, aunque eso no significa "confiscar, ni expropiar, ni expulsar" a las empresas extranjeras.
El deseo del nuevo Gobierno boliviano es que toda empresa extranjera tenga derecho a "recuperar su inversión" en el país y a obtener ganancia de ella, pero preservando siempre el derecho de los bolivianos a beneficiarse también de sus propios recursos naturales.
En consecuencia, se protegerán las inversiones de empresas que respeten la legislación boliviana y paguen sus impuestos, pero se actuará de forma "radical" contra las que no lo hagan así y se comporten como "contrabandistas". Tiene que haber estabilidad y seguridad jurídica para las inversiones extranjeras, reconoció Morales, pero para ello es preciso preservar "la justicia social".
El secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda, que presentó a Morales ante los informadores y compareció tras él, aseguró que el presidente boliviano no se refirió a ninguna empresa española como "contrabandista".
El Gobierno español, dijo, cumplirá con su obligación de defender los intereses de las empresas españolas con inversiones en Bolivia, pero está convencido de que los intereses de las empresas españolas serán plenamente compatibles con los proyectos de Morales, como lo serán también la lucha contra la pobreza en este país y la seguridad jurídica requerida por las inversiones extranjeras.
Moraleda se mostró seguro de que en los próximos días se pondrán de manifiesto las posibilidades de cooperación entre las empresas inversoras en Bolivia y las nuevas autoridades del país. En el caso concreto de Repsol YPF, avanzó que, en su opinión, habrá un "fenómeno de reinversión" en el país.
Con ese objetivo, el de cooperar con el desarrollo de Bolivia, se comprometió Rodríguez Zapatero a canjear por proyectos de educación una parte "sustancial" de la deuda que este país tiene con España, y que asciende a 120 millones de dólares.
Queda por determinar la parte que se condona y los proyectos por los que se canjea, aunque Morales avanzó que los recursos se destinarán a reducir el analfabetismo que padece la población de su país.
Fernando Moraleda aseguró que se trata de la primera plasmación del compromiso que España adquirió en la última Cumbre Iberoamericana de canjear deuda por educación, como instrumento esencial para luchar contra la pobreza y permitir el desarrollo de los pueblos.
En todo caso, Moraleda recordó que en los Presupuestos Generales del Estado para 2006 se recoge ya una ayuda de España a Bolivia de sesenta millones de euros.
El objetivo de Morales explicitado por él mismo es frenar "los ejércitos de desempleados" que se ven obligados a buscar su futuro fuera de Bolivia, en países como España, donde residen actualmente unos 80.000 bolivianos, la mayor parte de ellos acogidos al último proceso de regularización.
Morales explicó que su visita a España, invitado por el Gobierno, le abre las puertas de Europa, en una gira en la que se entrevistará con mandatarios de diez países de cuatro continentes. Esa definición permitió a Moraleda subrayar la importancia que el futuro gobierno boliviano otorga a España y a su papel en el actual contexto internacional.
De hecho, el presidente electo boliviano pidió a Rodríguez Zapatero que le sirva de "aliado", incluso de "mediador" ante otros gobiernos europeos y organismos internacionales, a los que quiere implicar en el desarrollo democrático del pueblo boliviano.
Los habitantes de su país, explicó, en su mayor parte indígenas como él, se han concienciado de que tienen deberes pero también derechos, incluido el de gobernarse, y pretenden modernizar su país y erradicar la injusticia social por medio de la democracia, "del voto, no con bala".
Ese principio fue reiterado por Morales, que llegó a decir que comparte con Ernesto "Che" Guevara todos sus objetivos, pero no la necesidad de levantarse en armas para conseguirlos.
Para cooperar a esa modernización, España prestará a Bolivia ayuda específica para implantar regadíos acordes con la infraestructura agropecuaria del país, pensando sobre todo en la potenciación del pequeño productor. La colaboración se concretará próximamente a través del Ministerio de Agricultura y Pesca y también de empresas españolas especializadas en este ámbito.
En la reunión no se habló de ningún imperialismo, según explicó el propio Morales, que en varias ocasiones anteriores se ha mostrado defensor de la lucha contra lo que considera neoimperialismo liderado por Estados Unidos.
Sólo habló de ello, bromeó, "con el falso Zapatero", el de la broma que le gastaron unos humoristas de la COPE haciéndose pasar por el presidente español y que provocó un incidente diplomático.
Aquel incidente pareció quedar saldado hoy con el humor de Rodríguez Zapatero y del propio Morales. El presidente español, nada más saludar a su invitado, se dirigió a los reporteros gráficos para asegurar que le había preguntado "si soy el de verdad". Luego, en la rueda de prensa, Morales confesó que aquella llamada "me sorprendió", aunque no le dio mayor trascendencia.
Después de que algunos sectores hayan reprochado a Morales su alineación con Fidel Castro y Hugo Chávez, el presidente electo boliviano aseguró que respeta a quienes quieran "hacer buena letra" con Estados Unidos o con cualquier otro país y reconoció, por ejemplo, que Venezuela es para él un ejemplo de cómo ejercer el derecho de propiedad sobre sus propios recursos para poder reinvertir en sectores claves de desarrollo.
Morales invitó expresamente a Rodríguez Zapatero a asistir a su toma de posesión como presidente, el próximo día 22. Su asistencia dependerá de la agenda, matizó después Fernando Moraleda. Sin embargo, en virtud del protocolo de este tipo de eventos, que se coordinan con la Casa Real, será el Príncipe de Asturias el que seguro que representará a España ante Bolivia en ese acto.
(SERVIMEDIA)
04 Ene 2006
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