Se trata de la primera vez en que esta agencia califica al Banco Popular, al que califica como "el más pequeño de los grandes bancos en España", si bien le atribuye unos "excelentes fundamentos financieros" y una fuerte capitalización.

El Banco Bilbao Vizcaya es el que más se acerca on un "rating" Aa2 y P1, al igual que el Popular, pero con B+ en cuanto a la fortaleza financiera.

Los restantes grandes bancos españoles reciben las siguientes calificaciones: Santander (Aa3/P-1 y B); BCH (A2/P1 y C), Argentaria (Aa3/P1 y B) y Banesto (A2/P2 y C).

Moody's atribuye una sólidas perspectivas de futuro al Banco Popular y elogia el compromiso que los gestores de esta entidad bancaria han mantenido con respecto a su fortaleza financiera.

Según la agencia americana, este banco segenta a sus clientes en función de grupos con necesidades similares a lo que ofrece los productos y servicios adecuados.

Tambien valora la especialización del banco que preside Luis Valls en el negocio doméstico al por menor, que le ha llevado a una alta rentabilidad, por encima de la media europea y "una de las más altas de Europa".

A pesar de la intensificación de la competencia bancaria en España, Moody's considera que el Popular mantiene una buena posición en el sistema bancario, aunque las esrategias de los restantes bancos están planteando a la entidad ahora calificada nuevos retos.

Sin embargo, la agencia adelanta que cree que el Popular mantendrá una "estrategia prudente" que no ponga en peligro la política conservadora que ha mostrado respecto a sus negocios y a su balance.