"Cuando se confirme la culpabilidad de los patronos de esos pesqueros, los pondremos de patitas en la calle, con respecto a la filiación a la cofradía", dijo Montoya.

Un total de 8 barcos pesqueros son los que la Guardia Civil investiga hasta la fecha, por llevar a bordo magrebíes ilegales a las costas andaluzas; algo que ocurre desde hace años.

Uno de esos pesqueros tiene su bse en el puerto de Algeciras y, según Rafael Montoya, "lleva ya siete meses vendiendo muy poco en la lonja, por lo que es imposible que sus tripulantes pudieran vivir sólo de la pesca, lo que le hace sospechoso con razones muy fundadas". El resto de los pesqueros tienen su base en Ceuta y realizaban el traslado de inmigrantes previo pago de unas 125.000 pesetas.

Según el máximo representante de los pescadores andaluces, el traslado ilegal de inmigrantes a bordo de los pesqueros se viene realizando dese hace mucho tiempo, ya que "los rumores sobre esto lo venimos escuchando desde hace dos años". Muchos pescadores y patrones obtienen pingües beneficios con el tráfico ilegal de inmigrantes (entre 50.000 y 100.000 pesetas por persona).

Rafael Montoya consideró además que "el problema de la inmigración radica en la falta de vigilancia policial, ya que hay constancia de que, aunque se están interceptando muchas pateras, otras tantas llegan a su objetivo final".

LOS PRIMEROS FILIPINOS

Por otro lad, fuerzas de la Guardia Civil arrestaron a 20 inmigrantes ilegales, 16 mujeres y 4 hombres, de nacionalidad filipina, en la costa de Tarifa, tras desembarcar de una patera.

Esta es la primera vez que los inmigrantes interceptados son de nacionalidad filipina, ya que hasta la fecha, el paso ilegal del continente africano al europeo lo hacían magrebíes.