A su juicio, las declaraciones del presidente del PNV en el 'Alderdi Eguna' ratan de marcar "el límite del nacionalismo como planteamiento político. Son declaraciones normales de su definición ideológica en el momento actual, cuando está encarando unas elecciones autonómicas".

A pesar de considerarlas "lógicas", Montoro declaró a Servimedia que las palabras de Xabier Arzalluz son "preocupantes", "porque lo que nos advierten -pese a ser algo que ya sabíamos- es que el nacionalismo está ahí".

Cristóbal Montoro cree que "hay que conseguir una integración de ese nacionalismoen un proyecto supranacionalista, como es el proyecto de la nación española, de la que esos nacionalismos, a los que que hay que respetar, forman parte. Las declaraciones de Arzalluz son inquietantes porque nos recuerdan que esos nacionalismos van a seguir siendo una cuestión pendiente, de gran trascendencia económica, en cuanto a proceder a su integración".

ECONOMIA VASCA

"El País Vasco no tendría los problemas económicos que tiene si no se hubiera echado en manos de una determinada concepción nacinalista; si por un lado no se le hubieran dado los vuelos que se le dieron a la violencia política en esa sociedad, y desde luego si no se hubiera confiado para el gobierno del País Vasco a unas opciones nacionalistas que no han sabido potenciar las capacidades mayores de ese territorio", agregó en declaraciones a Servimedia.

Para Montoro, los nacionalistas "no han sabido movilizar esa cultura empresarial y esa capacidad de iniciativa que tiene el País Vasco y que no existe en la misma medida en otraspartes de España. La pérdida de posición económica que ha tenido el País Vasco ha sido muy importante y se explica por razones políticas en buena medida".

"El nacionalismo vasco, en cuanto a gobierno, ha expandido excesivamente el sector público como respuesta a la crisis económica, y eso aplasta la capacidad de iniciativa empresarial, y no ha potenciado los resortes que tiene esa zona", continuó. "En vez de capitalizar esos resortes, lo que ha hecho ha sido provocar una expansión del poder político ecesiva en una sociedad donde el poder político tenía que haber jugado un papel muy inferior y muy compensado con otras fuerzas económicas que tenían que haber sido los motores de desarrollo".

"Y en eso", dijo Montoro, "los nacionalistas en el poder actual tienen responsabilidad, no sólo los propulsores de la violencia, sino también ellos. Cuando han sido muy ambiguos, cuando han hecho coaliciones de gobierno con partidos como el Socialista, creo que lo que han hecho ha sido dañar el tejido productivo e la economía vasca, y eso explica por qué la crisis económica es más profunda allí y por qué ha perdido posiciones relativas el País Vasco, cuando debería ser una de las zonas pujantes, que incluso estuviera sirviendo de motor de desarrollo económico para España".

En opinión del portavoz del PP en la Comisión de Economía del Congreso, "en vez de estar exportando otros elementos de inquietud, e incluso de violencia, (la Comunidad Vasca) debería estar exportando elementos positivos de desarrollo económco, y eso no es así. Se ha quedado atascada en una crisis que tiene mucho que ver con las instituciones y con la crisis en la que determinados planteamientos políticos han metido a la sociedad. Creo que las próximas elecciones autonómicas van a ser una oportunidad para desatascar esa situación".