Montilla, que participó hoy en el Fórum Europa, organizado por Nueva Economía Fórum, reconoció que a "nadie le gusta pagar impuestos", pero advirtió de que es el único modo de construir un Estado del bienestar sólido y duradero.

Se comprometió a no incrementar la presión fiscal que soportan los catalanes y propuso la reforma de impuestos como el de Sucesiones para elevar el mínimo exento de tributación. Se opuso, sin embargo, a la supresión de esta figura fiscal.

El que fuera ministro de Industria se manifestó convencido de que va a ganar las elecciones del próximo 1 de noviembre y dijo en un momento de su intervención que no salió del Gobierno de España para convertirse en "conseller de un gobierno presidido por Mas".

"PRONTO" PARA VOLVER

En el encuentro informativo quedó patente que el principal oponente de Montilla en las elecciones autonómicas es el candidato de CiU, al que reprochó que trate de hacer ver a los ciudadanos que el Gobierno presidido por los socialistas "lleva mucho tiempo", cuando CiU estuvo 23 años en el poder. "Quieren volver", sentenció, "y es demasiado pronto".

El objetivo del candidato del PSC es lograr la mayoría suficiente para gobernar "con las menores hipotecas posibles", e incluso contempla el gobierno en minoría, tal y como lo ejerce en Madrid José Luis Rodríguez Zapatero.

Tratará, por tanto, de no verse obligado a reeditar la fórmula del tripartito y descarta de principio un pacto con CiU. Montilla considera que su palabra en ese sentido es suficiente para avalar sus intenciones, no como le ocurre a Mas, que se ha comprometido a firmar ante notario que no gobernará con el PP.

"Cuando se necesita firmar los compromisos ante notario es que se tiene escasa credibilidad", dijo, y eso ocurre porque Convergència ha pactado con los populares "siempre que la aritmética lo ha permitido", como ocurrió en los años 1995 y 1999.

Tras tildar de "poco consistente" el programa electoral de CiU, criticó sus propuestas de rebaja fiscal y aumento del gasto público y dijo que iniciativas como la de los cheques por servicios son "yupis" y están "alejadas de la realidad".

Montilla considera que la foto del pacto sobre la reforma del Estatuto de Cataluña que protagonizaron Zapatero y Mas no le perjudicará en esta campaña, puesto que tanto el líder de ERC, Josep LLuis Carod-Rovira, como el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, y él mismo aconsejaron al presidente del Gobierno que incorporara a los nacionalistas al pacto del Estatuto.

"Sin ellos", reconoció, "la reforma del Estatuto no era posible. Hacer un Estatuto tras 25 años de vigencia del anterior sin la participación del primer partido de la oposición de Cataluña y sin el primer partido de la oposición en España era pura y simplemente no querer que saliera adelante el Estatuto".

CONSTITUCIONAL GRACIAS AL PSOE

Por ello, se optó conscientemente por incluir a CiU en el acuerdo. "Yo no creo que me perjudique esa foto", dijo, porque nosotros "la pedimos y avalamos" y el mérito de que el Estatuto sea constitucional es de los socialistas.

Montilla no tiene dudas del encaje constitucional del Estatuto y descarta de antemando que el Tribunal Constitucional pueda ponerle objeción alguna. Además, aspira a que el desarrollo de sus elementos centrales, como la ordenación territorial y la ley electoral, sea pactado por amplia mayoría o incluso por unanimidad.

Esa es, en su opinión, la única manera de que las reformas que emanen del desarrollo estatutario sean estables y duraderas, puesto que los socialistas creen, en contra de lo que postula CiU, que este Estatuto estará vigente durante bastante tiempo.

La opción que representa Montilla es la de quien "se cree el Estatuto" y pretende formar "un gobierno estable", que promueva "el diálogo y no la confrontación gratuita con el resto de España", dijo.

Sobre la propuesta de CiU de reformar la Constitución en caso de que el Tribunal Constitucional rechace la reforma del Estatuto, Montilla dijo que "hay quien no sabe qué decir para ocupar titulares" y abogó por la reforma constitucional sólo para reformar el Senado.