Así lo aseguró Montilla, informa el PSC, desde la Abadía de Montserrat, donde acudió, nada más entregar a Joan Clos la cartera de ministro de Industria, Turismo y Comercio, para entrevistarse con el Padre Abad, Josep Maria Soler.

El candidato socialista explicó que la conversión con el clérigo versó sobre "el papel de la Iglesia en la sociedad actual y su relación con los poderes públicos".

Montilla señaló que "nosotros defendemos la separación de la Iglesia y el Estado, la aconfesionalidad de las instituciones, y la laicidad, pero eso no quiere decir indiferencia con el hecho religioso".

El ex ministro de Industria destacó que "la religión es un factor de integración social" y puso especial énfasis en los valores que durante muchos años ha contribuido a difundir la religión cristiana.

En su primer acto ya desposeído del cargo de ministro, Montilla ha querido acercarse hasta la Abadía de Montserrat, a la que ha calificado como un "centro espiritual, cultural, identitario y religioso de nuestro país".

Asimismo, Montilla aprovechó su intervención para criticar al candidato de CiU a la Generalitat, Artur Mas, de quien ha dicho que "va con el reloj cambiado" al concentrar su discurso en las críticas al tripartito.

Tiene su reloj "unos cuantos meses" atrás, sostuvo Montilla, salvo que se refiera a "un nuevo tripartito, formado por Convergència, Unió y el PP".

En cuanto a las críticas lanzadas por el secretario general del PP, Ángel Acebes, sobre su persona, Montilla apuntó que si el "número dos" del PP "hablara bien de mí y no me criticara estaría sumamente preocupado. Que me critique es un motivo de satisfacción".