En Cuenca, Toledo, Ciudad Real, Badajoz, Jaén, órdoba, Sevilla, Valladolid, Palencia, León, Mallorca y Menorca ha llovido desde septiembre menos de la mitad de lo que es habitual.

Las precipitaciones en Ibiza, Galicia, el resto de las dos Castillas, parte de Extremadura, Madrid y el curso medio del Ebro han estado entre un 25 y un 50 por ciento por debajo de lo usual.

Por el contrario, en Cantabria, el litoral mediterráneo desde Cataluña hasta Almería y los Pirineos, los niveles registrados han estado próximos a los normales.

Finalmente,sólo en Asturias, el País Vasco, Albacete, Murcia y un área de Cataluña cercana a Tarragona han superado el índice de lluvias considerado normal.

Los datos recogidos por el Instituto Nacional de Meteorología durante la primera mitad del actual año hidrológico (de septiembre a marzo) indican que la sequía, que el año pasado afectó con especial incidencia a la zona occidental del país, se ha trasladado hacia el centro y sur de España.

Durante el mismo periodo de tiempo del anterior año hidrológico 1991-1992), llovió menos de la mitad de lo que es habitual en Burgos, Palencia, Valladolid, Zamora, Salamanca, el oeste de Extremadura y Andalucía.

En algunas áreas de Galicia, la cordillera cantábrica, parte del Sistema Ibérico central, La Mancha, resto de Extremadura, centro de Andalucía, Mallorca y Menorca las precipitaciones oscilaron entre el 50 y el 25 por ciento por debajo de los niveles considerados normales.

Sin embargo, en puntos aislados del litoral cantábrico, Zaragoza, la mitad orienal de Andalucía, Murcia, Valencia y algunas zonas de Cataluña llovió "lo normal".

Al igual que este año, en diversas zonas de la comunidad catalana las precipitaciones superaron los índices habituales, aunque en esa ocasión la zona afectada fue Gerona. También en Valencia, Murcia, Almería e Ibiza llovió más de lo usual.