Así lo explicó a los periodistas, al término del Pleno del Consejo Fiscal, Fernando Herrero Tejedor, vocal miembro de la Asociación de Fiscales, que demandaba la dimisión de Conde-Pumpido por su política de nombramientos y ceses culminada con la renuncia de Eduardo Fungairiño como fiscal jefe de la Audiencia Nacional. Según Herrero Tejedor, es la primera vez que la AF pide en el Pleno del Consejo Fiscal la dimisión de un fiscal general. Para los vocales de esta asociación conservadora, el caso de Fungairiño ha sido "la gota que colma el vaso de la política de nombramientos y ceses" de Conde-Pumpido. Según explicó Herrero Tejedor, el debate que se suscitó en el Pleno del Consejo Fiscal fue "vivo y encendido, y, a veces de un tono un poco más subido de lo que yo hubiera preferido".

Para la AF, la renuncia de Fungairiño fue "forzada" y, por lo tanto, se trata en realidad de una remoción que debería tramitarse conforme a lo que establece la ley.

Herrero Tejedor negó que a los vocales de la AF se les haya agotado la paciencia con Conde-Pumpido, al asegurar que, aunque no están de acuerdo con él en muchos aspectos, sí lo están en otros asuntos. "Queremos seguir trabajando codo con codo con él, para el bien de la carrera fiscal y del servicio público de la justicia", añadió.

COHERENTES

Asimismo, negó que hubiera "incoherencia" en la AF, teniendo en cuenta que en su día se opusieron al nombramiento de Fungairiño como fiscal jefe de la Audiencia Nacional y que ahora se oponen a su marcha.

Argumentó que su oposición entonces y ahora se debe a que para la AF, ni aquel nombramiento ni la renuncia forzada de Fungairiño se atienen a Derecho.