La Parroquia de San Agustín pertenece a la diócesis chilena de Talca, a 250 kilómetros al sur de Santiago de Chile. Manuel Arranz se disponía el pasado da 10 a reparar unas goteras en el techo de la iglesia cuando cayó sobre un falso techo que cedió y provocó que se desplomara en el suelo desde una altura de más de 15 metros.

Una feligresa que se encontraba en ese momento en el templo dio la voz de alarma y provocó que acudiese en auxilio del sacerdote el obispo de la diócesis, Carlos González, quien le administró la absolución.

El misionero español permaneció inconsciente desde el momento de la caida hasta su fallecimiento, que se produjo el pasdo martes.

La Parroquia de San Agustín era obra del sacerdote toledano, ya que hace unos años sufrió un incendio que sólo dejó en pie sus cuatro paredes. Manuel Arranz reconstruyó piedra a piedra la iglesia con la ayuda de sus feligreses.