La pasada semana la Guardia Civil volvió a rastrear la sierra de Santa Olalla, un lugar muy abrupto lleno de cuevas y casas abandonadas, para intentar localizarle. Sin embargo, la búsqueda no ha dado ningún resultado, al igual que las investigaciones realizadas en otras zonas, como la Dehesa de San Pedro, Vallefrío, la Mina o la Huerta de Rivero, entre otras.

Benito Pérez se había quedado solo unos meses ants de desaparecer, ya que su madre, que le cuidaba, tuvo que ser internada en una residencia de Perales del Puerto debido a que ya no podía valerse por sí misma. Desde entonces, según algunos vecinos, se le veía cabizbajo y retraído.

La fotografía de Benito Pérez sigue expuesta en numerosos establecimientos públicos de la región. Mide entre 1,60 y 1,65 metros de altura y en el momento de su desaparición vestía pantalón marrón, camisa clara de manga larga y zapatillas de deporte negras.