Según el comunicado, aunque han sido derogados algunos preceptos de los decretos 1250/85, 1251/85 y 2707/85 del Ministerio de Industria, la presencia de la letra eñ seguirá siendo un requisito obligatorio para la venta de todos estos aparatos en nuestro país.

El Gobierno ha defendido ante las autoridades comunitarias la obligatoriedad de que la letra eñe siga figurando en todo producto de esta naturaleza que se venda en España, independientemente de los preceptos que sea necesario articular.

La nota del ministerio afirma que la Comisión Europea ha admitido plenamente este planteamiento, como reconoce la Dirección General de Mercado Interior y Asuntos Industiales, que justifica "una reglamentación que imponga la presencia de signos particulares de una lengua, al objeto de proteger al consumidor".

Esa defensa del comprador de aparatos electrónicos inspira al Gobierno para adoptar un decreto por el que el Ministerio de Sanidad y Consumo mantiene esa obligatoriedad, amparada por el artículo 36 del Tratado de Roma y la jurisprudencia del Tribunal Europeo de Luxemburgo.