El enorme edificio, que tiene también entrada por la calle de Los Madrazo, era un laberinto de escaleras, pasillos y cuartos de baño, inaccesibles para personas discapacitadas.

Ahora tras las reformas acometidas, como las rampas telescópicas instaladas o la plataforma salvaescalera de la entrada principal de la calle de Alcalá y que ha costado 19.000 euros, las personas discapacitadas tienen más fácil entrar y transitar por este ministerio.

Adaptar los vetustos cuartos de baño de la planta baja, segunda, tercera y quinta, ha costado 179.000 euros, según datos a los que ha tenido acceso Servimedia.

En la instalación de bandas antideslizantes en las escaleras, el Ministerio ha gastado 9.200 euros y en la colocación de cinco plataformas y un elevador adaptado, 70.800 euros.

Hacer accesible la sede ministerial fue una de las premisas de la titular del departamento, Mercedes Cabrera, porque, como ha dicho en muchas de sus comparecencias, era impensable que "la casa de las personas con discapacidad no fuera accesible".