MIJAIL Y RAISA GORBACHOV ABANDONARON LANZAROTE CON LA PROMESA DE VOLVER EL PROXIMO AÑO
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Mijail Gorbachov y su esposa Raisa abandonaron a primera hora de hoy el aeropuerto de la isla de Lanzarote con destino a Madrid a bordo de un avión de las Fuerzas Aéreas esañolas. Desde la capital de España, el ex presidente de la Unión Soviética tomará un avión regular con destino a Moscú.
Gorbachov ha prometido que volverá, ya que ha dejado varias cosas pendientes en la isla. Una es la inauguración del monumento a la paz, al que posiblemente acudirá también el ex presidente norteamericano Ronald Reagan. La idea, que partió de la Consejería de Turismo del Gobierno canario, consiste en un monumento que consta de dos misiles, uno soviético y otro norteamerciano, engarzads por sus carcasas y que simbolizan el final de la guerra fria.
Pero el ex dirigente soviético también tendrá que volver para degustar el cordero que le preparará Francisco Martínez, el cocinero de La Mareta, residencia oficial del matrimonio y al que Mijail le ha dicho que vendría para probarlo.
Otra de las cosas pendientes del matrimonio Gorbachov consiste en la visita a la montaña del Fuego, una de las atracciones turísticas que la pareja ha dejado para más adelante.
Han sido quince días n la isla de los volcanes en los que el matrimonio se ha ganado el afecto de los habitantes de la isla y de los turistas, que han podido saludar y fotografiar al creador de la perestroika y premio nobel de la paz.
Prueba de ese cariño, las decenas de niños que ayer se dieron cita a última hora delante de la residencia de los Gorbachov. Ante tal avalancha, Mijail ordenó en persona abrir la puerta para que pudieran entrar, en oleadas, las personas que hasta allí se habían acercado para saludarle.
Arás quedan también las caminatas diarias que recordarán todos los periodistas que, a paso ligero, han tenido que seguir como podían el ritmo del matrimonio, que cada día hacía más kilómetros en menos tiempo.
Gorbachov se lleva en sus maletas algunas páginas del libro que está escribiendo y al que le dedicaba una media de dos horas diarias.
Raisa, por su parte, se lleva entre otras cosas, dos paquetes de judías blancas, ya que piensa seguir al pie de la letra la receta que le dió Francisco Martíne para hacer un potaje español en su casa de Moscú, con todos los ingredientes, incluido el chorizo.
(SERVIMEDIA)
10 Sep 1992