Después de una marcha de cincuenta minutos, los manifestantes guardaron un cuarto de hora de silencio frente al Ayuntamiento donostiarra, tras lo cual fue leído un comunicado n el que recordaron la petición de la ONU a los países más industrializados de destinar el 0,7 de su PIB a los países más desfavorecidos, que unicamente fue cumplido por cinco de ellos.

Los miembros de la comisión del 0,7 del PIB de la zona de Irún y Fuenterrabía enviarán próximamente una carta al ministro de Economía, Pedro Solbes, en la que le exigen que en los Presupuestos del próximo año se dedique el 0,7 por ciento del PIB a los países empobrecidos y le instan a que tenga "el coraje de enfrentars al desafío más urgente de nuestro fin de siglo".

En este sentido, amenazan con realizar una huelga de hambre indefinida el próximo 15 de octubre si para entonces no han recibido una respuesta por parte de la Administración, ya que, a juicio de la coordinadora de dicha plataforma, Cintia Palenzuela, "hay que evitar la Ruanda del próximo año".

Según Palenzuela, lo que ha sucedido en Ruanda se podía haber evitado si se hubiese ofrecido una ayuda que hubiera satisfecho las necesidades de la població. "Es suicida esperar otro año. El tiempo para reaccionar es el recurso más escaso", adujo.

Asimismo, denunció el silencio institucional puesto que a las invitaciones realizadas a instituciones, partidos políticos, sindicatos y entidades económicas de la zona, únicamente han apoyado esta petición el obispo de San Sebastián, José María Setién, y el alcalde de la ciudad, el socialista Odón Elorza, que acudió a la manifestación.