Según datos del Grupo de investigación de mercados NPD, el precio medio del mercado español fue, también, el más caro entre los mercados de los países europeos.

Frente a un precio medio de 10,3 euros por juguete en Alemania, o 12,8 euros en Francia, en España alcanzó los 17,8 euros, con un incremento sobre el año 2006 del 2,4%.

En España, el consumidor compra productos más caros, especialmente en el periodo navideño, en el que el precio medio del juguete ascendió hasta los 23,4 euros.

Por otra parte, el mercado español es el más estacional de Europa, ya que las ventas se concentran fuertemente en el las fiestas navideñas. De este modo, el mes de diciembre y la primera semana de enero, representaron más del 56% de las ventas de todo el 2007.

Además el comprador suele esperar a última hora para realizar sus compras: en la pasada campaña de Navidad, la última semana del año junto a la primera semana de Enero supusieron al 20% de las ventas anuales del sector.

Actualmente, y junto al juguete más tradicional, la tendencia apunta a la presencia cada vez más importante de productos que incorporan un cierto grado de tecnología y los juguetes basados en sistemas electrónicos (como cámaras digitales, mp3, etcétera).

A pesar de la buena salud que el sector ha mostrado en los últimos años, el fuerte incremento de las ventas de videojuegos supone una importante amenaza para el sector, más aún si se tiene en cuenta la edad cada vez más baja del consumidor de dichos productos.