Rajoy, que viitó a ambos dirigentes sindicales dentro de la ronda de contactos emprendida tras su designación como candidato del PP a la Presidencia del Gobierno, escuchó las quejas de Méndez y Fidalgo por el próximo despido de aproximadamente 400 asalariados de la cadena privada.

Fidalgo pidió al nuevo líder popular que tenga "inquietud" e "interés" por los despidos que piensa llevar a cabo la compañía después de intesas negociaciones con el Comité de Empresa y la huelga que han planteado los trabajadores.

Pr su parte, Rajoy calificó de "lamentable" el mero hecho de que cualquier persona pueda perder su empleo, pero añadió que son las empresas quienes toman este tipo de decisiones. "Imagino que las toman porque tienen razones", apostilló.

Rajoy señaló que estos ajustes labores generan "cualquier cosa menos entusiasmo" e incluso comentó: "maldita la gracia que me hace una situación como ésa".