"Si decimos que Melilla es una ciudad espaola de pleno derecho", afirmó Otero, "no tiene sentido mantener allí un cuerpo de naturaleza colonial como es la Legión".

Añadió que, además de adoptar inmediatamente esta medida, el Ministerio de Defensa debería reconsiderar la existencia de la Legión, porque "si no tiene sentido actualmente y no se lleva a cabo un cambio en sus planteamientos, debería suprimirse".

Tras resaltar el carácter racista de los altercados de Melilla, este responsable de la Asociación Pro Derechos Humanos se mostró conencido de la complicidad de los mandos de la Legión, que "por fuerza han tenido que alentar y consentir" los sucesos, producidos tras el asesinato de un legionario.

Asimismo, Otero indicó que "se está intentando echar tierra sobre este asunto", porque nadie desea replantearse la esencia y la razón de ser de la Legión, y aseguró que, aunque se haya arrestado a algunos de sus mandos por lo ocurrido, "lo merecen más sin duda el coronel, el general y quien está por encima de ellos".