Meditar al menos 20 minutos, dos veces al día, puede ser la terapia complementaria a los habituales tratamientos contra la hipertensión y otros problemas cardiovasculares. La investigación, realizada por científicos del College of Maharishi Vedic Medicine de Iowa, muestra que la técnica reduce en 98 centésimas de milímetro los depósitos de grasa en las arterias, por lo que elimina en un 15% el riesgo de embolia, según informa la revista "Stroke".

El análisis de personas hipertensas de rigen afroamericano, un grupo de alto riesgo, demostró que la meditación reducía niveles de estrés y riesgos de sufrir ataques coronarios. Este hallazgo, que permitiría reforzar los tratamientos basados en fármacos, ofrece una nueva opción a las peligrosas intervenciones quirúrgicas.

La meditación trascendental, un método desarrollado en la India hace 2.000 años, ha sido analizado otras veces por su valor terapéutico, aunque sólo ahora se ha comprobado su valor médico.