En la capital navarra hay en la actualidad 110 reclusos por su negativa a realizar el servicio militar o la PSS. Del total, 46 disfrutan del segundo grado y el resto del tercer grado penitenciario, con salidad diurnas y permisos. Además, medio centenar de jóvenes de la Comunidad Foral tienen pendientes órdenes de búsqueda y captura para ingresar e prisión próximamente.

Los insumisos en huelga de hambre, según varios portavoces de los colectivos de objetores de Navarra, sólo ingerirán agua con limón y, en principio, su postura tiene carácter indefinido hasta lograr "una sensibilización social".

Bajo el lema "No des de comer a los ejércitos", este grupo de huelguistas quiere denunciar el mantenimiento, "en contra de la mayoría social, del servicio militar obligatorio", el endurecimiento de la Ley de Objeción de Conciencia, el encarcelamient de insumisos y la política armamentística del Gobierno, tanto en su vertiente de gastos e inversiones militares como desde el punto de vista de sus intervenciones en el exterior del país, "a través del propio Ejército, la OTAN y la UEO".

Por todo ello, apelan a la sociedad civil a que no participe con este tipo de prácticas bélicas y militaristas, no pague impuestos para gastos militares, luche por la reconversión de la industria armamentística, promueva la no cooperación de los ayuntamientos en el rclutamiento de jóvenes y rechace, desde sindicatos y ONGs, la prestación social sustitutoria.

"La huelga de hambre quiere ser una respuesta al castigo al que los presos insumisos han sido sometidos por sus propias ideas y para que quede claro una cuestión: a todos nos toca desobedecer", dijo un portavoz de dichos movimientos. "Nosotros planteamos una solución radical: Es necesario cuestionarse la propia existencia de los ejércitos".

La huelga de hambre de estos 46 reclusos irá acompañada desde elexterior de la prisión de Pamplona por diversas iniciativas. Además de manifestaciones frente a la cárcel y cadenas humanas de protestas, un grupo de personas efectuará un ayuno durante el fin de semana del 22 al 24 de este mes.

El padre de uno de los insumisos presos que secundan la huelga manifestó que "siempre, nuestra primera reacción ha sido de dolor por el encarcelamiento de un ser querido. Les queríamos libres, pero cuando ves sus ideas, sientes simpatía y solidaridad por ellos. Les queremos caa día más por el sacrificio que están realizando".