Por otra parte, Palop adelantó que el próximo viernes el Consejo de Ministros tomará una decisión sobre un nuevo envío de agua desde la cuenca del Tajo al Segura que, al igual que el pasado trimestre, no incluirá agua para regadío.

El responsable de Agua compareció ante los periodistas tras la reunión de la Comisión de Explotación del Acueducto Tajo-Segura en la que se analizó la situación en la que se encuentran los embalses de la cabecera del Tajo, Entrepeñas y Buendía, de los que se nutre el trasvase.

Tras analizar la situación en la cabecera del Tajo, Palop reiteró la necesidad de ser cautos a la hora de tomar cualquier decisión sobre posibles trasvases. Reconoció que la situación para el regadío "es angustiosa", pero también reiteró que la prioridad seguirá siendo el abastecimiento humano, "que incluso podría peligrar su no llueve", aseveró.

"La situación obliga a ser cautos y a esperar la evolución de la climatología", insistió, si bien adelantó que las previsiones no son buenas. "Estamos en un año más seco incluso que en el año anterior. Hay que esperar a ver si llueve en este segundo trimestre del año hidrológico, en enero, febrero y marzo, para compensar la debacle del trimestre de octubre a diciembre".

Advirtió que existe el riesgo de que la situación empeore de "forma importante" y hacer peligrar incluso el agua para el abastecimiento a poblaciones. "Podemos enfrentarnos con una sequía de la misma magnitud que las sequías de los años 80 y 90, que ya entonces tuvieron consecuencias incluso en la calidad de vida, con un 25% de población afectada por restricciones".

Asimismo, sobre la aportación de agua a las Tablas de Daimiel, el responsable de Agua subrayó que la recomendación sería elegir un mejor momento para dicho trasvase, "cuando haya llovido, el suelo esté más húmedo y no se pierda el agua que trasvasemos". "Tendrá que abastecerse pero hay que elegir el mejor momento", indicó.

Según explicó, por ley podrían cederse a las Tablas de Daimiel 30 hectómetros cúbicos para todo el año. La petición oficial del Parque es de 20 hectómetros cúbicos. "Es una cantidad adecuada y nada ostentosa", reconoció.

También hoy Medio Ambiente daba conocer los datos sobre la situación de los embalses que esta semana han perdido 123 hectómetros cúbicos (0,2%) respecto a la semana anterior. Es la primera vez desde el pasado 11 de octubre que las reservas de los emabalses disminuyen y se sitúan de nuevo al 45,3% de su capacidad total, con 24.142 hectómetros cúbicos de agua embalsada.

Esta semana la Cuenca del Júcar, una de las más deficitarias, ha aumentado el agua embalsada en 7 hectómetros cúbicos, mientras que la del Tajo ha vuelto a disminuir en 29 hectómetros cúbicos.

Según señaló Palop, sólo la Cuenca del Norte, que alberga a Galicia Costa, País Vasco, Cantabria y Asturias, se están viendo beneficiadas de las precipitaciones por encima de la media del pasado año. Todas las demás tienen problemas serios de sequía, sobre todo las del Segura y el Júcar.