MÉDICOS SIN FRONTERAS DENUNCIA QUE LA INDUSTRIA FARMACÉUTICA NOPRODUCE FÁRMACOS PARA TRATAR EL SIDA EN NIÑOS
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Médicos sin Fronteras (MSF) denunció hoy a las compañías farmacéuticas por no producir versiones de sus medicamentos adaptadas a los niños para tratar el sida y aseguró que la mitad de todos los pequeños con VIH/sida mueren antes de cumplir los dos años, entre otras, por esta causa.
Por este motivo, MSF hizo un llamamiento a las empresas farmacéuticas para que desarrollen formulaciones pediátricas fáciles de administrar de todos sus medicamentos para el sida y contribuyan así a prolongar las vidas de muchos más niños con esta enfermedad.
Además, continúa la ONG en un comunicado, "es urgente la necesidad de pruebas de sida simples y asequibles para bebés en contextos con recursos limitados".
Las pruebas existentes para detectar el virus en niños están fuera del alcance de los habitantes de contextos con recursos limitados o no están adaptadas al uso en estos entornos y la prueba de rutina disponible en países pobres no funciona en bebés menores de 18 meses porque todavía son portadores de los anticuerpos de sus madres, indica MSF.
En los países occidentales, la transmisión del VIH de madres a hijos puede evitarse en un 99% de los casos y los bebés pueden someterse antes a los análisis y por tanto recibir tratamiento a tiempo. Por el contrario, este hecho está muy lejos de la realidad en los países en desarrollo.
"MSF está proporcionando medicamentos antiretrovirales a casi 800 niños que viven con el VIH/sida aquí en Kenia", dice Rachel Thomas, coordinadora médica del proyecto de MSF en Kibera, Nairobi.
"Los resultados son muy buenos", continúa, "pero se trata de una batalla cuesta arriba. En ausencia de píldoras adaptadas a los niños que combinen todos los medicamentos necesarios en una sola tableta, el personal médico y los cuidadores se ven obligados a triturar las combinaciones de medicamentos para adultos."
Además de ser menos eficaz, explica la ONG, una dosis inferior a la necesaria puede provocar la aparición de resistencias al tratamiento, mientras que una sobredosis puede resultar tóxica para estos pequeños pacientes.
Igualmente, continúa, los pocos medicamentos existentes en forma de jarabe o polvos destinados a los niños son de un uso muy poco práctico, pues el pequeño debe tomar cantidades distintas de tres jarabes diferentes que además suelen tener muy mal sabor.
Algunos medicamentos requieren además refrigeración y otros agua limpia, dos elementos que a menudo no se encuentran en contextos pobres.
(SERVIMEDIA)
28 Nov 2005
IGA