La asociación realizó este anuncio en Madrid a través de la presidena de MSF España, Pilar Carrasco, con motivo de las III Jornada Internacional de las Poblaciones en Peligro, que celebró hoy esta ONG.

Pilar Carrasco y el director de la sección española, Josep Vargas, agradecieron a la sociedad española "el profundo grado de generosidad que ha demostrado en el último año", y a la Plataforma 0,7 la labor de difusión de las necesidades del Tercer Mundo.

"Mantenemos el optimismo más grande en lograr que la sociedad española se sensibilice", dijo Pilar Carrasco, "cad vez más allá de lo anecdótico, lo pasajero y las modas".

Sobre Ruanda, la presidenta de Médicos Sin Fronteras España criticó que los gobiernos occidentales "han utilizado la ayuda humanitaria de forma política, para acallar nuestras conciencias", y señaló que el conflicto ruandés continúa, "aunque de otra forma".

"Estamos ante un crimen sin castigo", señaló Carrasco, "en el que muchos de los que programaron las matanzas viven en países occidentales sin que exista ninguna orden de búsqueda contraellos, o controlan la distribución de las ayudas humanitarias en muchos de los campos de refugiados".

DOS MIL VOLUNTARIOS

El informe "Poblaciones en Peligro 1995" de Médicos Sin Fronteras recoge la labor de los aproximadamente 2.000 voluntarios con que esta ONG cuenta en los 67 países donde ha realizado programas durante el último año.

Médicos Sin Fronteras de España desarrolló 28 programas durante 1994 en Cuba, Guatemala, Colombia, Panamá, Perú y Bolivia, en el continente americano; Georgia y a ex Yugoslavia, en los continentes europeo y asiático, y Somalia, Tanzania, Monzambique, Kenia, Angola, Guinea Ecuatorial y Mauritania, en el africano.

Pilar Carrasco denunció también la situación de hambruna a la que se enfrentan numerosas poblaciones aisladas por los gobiernos y los grupos guerrilleros en el sur de Sudán y en Angola, así como las otras "guerras olvidadas" de Zaire, Somalia y Afganistán.

Tanto la presidenta como el director de la sección española de MSF, Josep Vargas, advirtiern también sobre las intermitentes epidemias de paludismo y sida que están afectando a la población activa en varios paises africanos y que les amenaza con dejarles sin trabajdores jóvenes.

Respecto a la situación de Sudán, Amnistía Internacional ha solicitado a la ONU la creación de un equipo de observación de los derechos humanos en el país, ante las sucesivas matanzas registradas entre miembros de las etnias dinka y nuer, según informó hoy en Nairobi (Kenia) el secretario de esta organización, Pierr Sané.

OTRA RUANDA

Los datos disponibles por AI indican que tanto el Gobierno militar sudanés como los dos grupos principales de oposición armada, el Ejército Popular de Liberación de Sudán (EPLS) y el Ejército para la Independencia del Sur de Sudán (EISS), practican "de forma habitual" la tortura e incluso el asesinato de disidentes.

Amnistía Internacional pretende que se constituya un organismo independiente al que los sudaneses puedan recurrir para informar sobre violaciones de los derechos umanos sin temor a represalias.

Desde el golpe de Estado de 1989, perpetrado por Omar Hassan Ahmad al Bashir, los abusos han sido continuos al norte y sur del país, especialmente en este último, donde existe un enfrentamiento armado entre el Gobierno y las dos guerrillas.

Amnistía ha acusado no sólo al Gobierno militar, sino también al Ejército Popular de Liberación de Sudán, dirigido por John Garang de Mabior, y al Ejército para la Independencia del Sur de Sudán, cuyo jefe es Riek Machar Teny-Dhrgon, de practicar la limpieza étnica.

Respecto al gobierno de Al Bashir, AI estima que "mediante la interpretación gubernamental de un programa islamista radical, usa la tortura y detención de políticos y sindicalistas".

De los grupos de oposición armada, la organización humanitaria señala que el EPLS practica la represión entre los disidentes internos de origen nuer, mientras que el EISS hace lo mismo con los de origen dinka.