Según MSF, los masivos desplazamientos fueron confirmados hoy por todas las organizaciones humanitarias en la zona. La población se encuentra atrapada entre dos fuegos: el Frente Patriótico Ruands y las amenazas de la FAR.

MSF denuncia que los ruandeses que están en la "zonade seguridad" se encuentran en una "tierra de nadie" a nivel administrativo y judicial, mientras que más de 800 personas entran cada hora en Zaire, y en Bukavu ya se contabilizan más de 25.000 refugiados.

En Gikongoro, los ruandeses que abandonan los campos son reemplazados por otros que bajan de las colinas, por lo que según MSF, aumenta el riesgo de desplazamientos en el interior de la zona.

A su juicio, la atuación de las tropas franceses "ha permitido un respiro" pero no ha conseguido ningún progreso en la zona, "auténtico santuario en el que persiste la violencia y la propaganda del FAR".

MSF califica de "escándalo" el hecho de que el Consejo de Seguridad de la ONU "no haya sido capaz de organizar un relevo satisfactorio ante la partida de las tropas francesas".

La organización humanitaria también advierte que no existe en Zaire una infraestructura de acogida de nuevos refugiados, "y puede temerseuna nueva catástrofe si se incrementa en los próximos días".

Respecto a la situación en Goma, MSF asegura que cada día mueren 500 personas por disentería, paludismo, meningitis o malnutrición.