El secretario general de estesindicato, Angel Rivas, explicó hoy que la demanda fue presentada en marzo del año pasado al comprobar que algunos de estos médicos estaban percibiendo en sus nóminas entre 30.000 y 40.000 pesetas menos.

"Estos facultativos nunca han conocido el número de pacientes que atienden y a la hora de reclamar la reducción de sus emolumentos no contábamos con ninguna prueba que confirmase las bajas de cartillas de la Seguridad Social en cada caso", indicó Rivas.

Según manifestaron fuentes de la Dirección erritorial del Insalud a Servimedia, este conflicto tuvo su origen en un fallo en la aplicación de claves informáticas, ya que los médicos afectados cobraron durante al menos 8 meses sus cuotas por trabajadores autónomos atendidos como cuotas agrarias, que son pagadas algo mejor.

El listado mensual de los beneficiarios provocará, en opinión del Insalud, una sobrecarga administrativa en la dirección territorial, ya que en la actualidad existen en Madrid unos 3.000 médicos generales que cobran por este istema.

Por otra parte, el Sindicato Médico de Madrid pedirá explicaciones a la Administración por el retraso en el reparto de la productividad variable de los médicos de los hospitales La Paz y Ramón y Cajal.

REDUCCION DE LISTAS DE ESPERA

Esta organización sindical, junto a la CSIF, respalda algunas iniciativas para acabar con las listas de espera de los centros hospitalarios, como una mejor dotación de la Atención Primaria, la elaboración de un plan gerontológico que dirija a los ancianos a cntros especializados, la mejora de la gestión sanitaria y el incentivo de los profesionales.

En cuanto a su posición en la mesa sectorial de la sanidad, estas organizaciones no suscribirán la propuesta realizada por el Ministerio de Sanidad y Consumo hasta que no cumpla acuerdos anteriores y no ofrezca unos fondos económicos adicionales a los ya presupuestados.

Según Jaime García Condado, secretario general de Sanidad de CSI-CSIF, los fondos propuestos por el ministerio son: el aprobado en la mes general, un segundo formado por la productividad variable y un tercero por el presupuesto del Insalud destinados a sustituciones.

"Esta propuesta", añadió, "es imposible que pueda ser aceptada por nuestra organización, dado que no supone la creación de fondos adicionales".