González, en un seminario organizado por la Fundación ETNOR, ha afirmado que sólo lo que es medible es gestionable, y es necesario hacer un esfuerzo por medir los impactos que las políticas de responsabilidad social están teniendo en cada grupo de interés para poder mejorar las actuaciones que se llevan a cabo.

Además, manifestó que, en estos momentos, existe una mayor conciencia de los agentes sociales y la globalización de la comunicación, que hace más vulnerables a las empresas, por lo que las compañías están mostrando una mayor preocupación por la responsabilidad social.

En cuanto a las razones para implantar la responsabilidad social puso de relieve la obligación moral con el entorno, la necesidad de obtener licencia para operar tanto legal como de legitimidad social, así como generar una buena reputación.

En cuanto a cómo llevar a la práctica la RSC, González destacó que cualquier tipo de empresa ha de seguir un procedimiento bastante similar, que pasa por la identificación de los grupos de interés y el análisis de sus expectativas legítimas, el diseño de políticas de responsabiliadd social y de planes de actuación para llevarlos a la práctica, la información de los aspectos relevantes a cada grupo de interés y, por último, la verificación de todo el proceso.