En primer lugar, UCE advierte que es obligación de los Centros Sanitarios de Atención Primaria y de las Farmacias tener a disposición del público la lista de medicamentos excluidos de la financiación de la Seguridad Social,así como el listado de los de aportación reducida, por lo que el usuaio debe exigir que se lo muestren.

Los medicamentos de aportación reducida, es decir, aquellos destinados a enfermos crónicos seguirán costando el 10 por ciento de su importe, hasta un máximo de 400 pesetas, por lo que el porcentaje no se ha variado pero sÍ el tope máximo, aunque sigue siendo inferior al que hubiera resultado si se aplicara acumulativamente el IPC (680 pesetas).

Los especialistas farmacéuticos que ya posean finaciación por parte de la Seguridad Social y las que, al ser autorizadas y registradas se incluyen en la misma, podrán ser excluidas si ya existen medicamentos más baratos y con la misma eficacia.

Según la UCE, quedan fuera de la financiación los cosméticos o productos de utilización cosmética, dietéticos y productos de régimen, aguas minerales, elixires bucodentales, dentífricos, artículos de confitería medicamentosa y jabones medicinales.

Por último, la UCE recuerda que para los médicos sigan tenendo la facultad de prescribir estos medicamentos excluidos de la financiación, se ha configurdo un nuevo modelo de receta específico para estos medicamentos.