MDRID. PRESENTAN DOS DENUNCIAS CONTRA LA POLICIA POR SU ACTUACION EN EL "ASALTO" A LA TABERNA "LA GRANDOLA", EL PASADO DOMINGO
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Elvira Germana, propietaria de la taberna "La Grandola", situada en la calle Sombrerete de Madrid, ha presentado una denuncia contra agentes del Cuerpo Nacional de Policía por su actuación el pasado domingo tras una protesta 'okupa' en pleno centro de la capital, según informó a Servimedia el abogado de la denunciante, Francisco García Cediel.
Por su parte, el letrado ha presentado otra denuncia por vejaciones y lesiones por parte de los agentes que intervinieron en los hechos. Según su relato, acudió a la taberna a requerimiento de su cliente tras producirse el asalto al local por parte de la policía, y una vez allí los policías le insultaron y le agredieron con la defensa, causándole daños en la pierna derecha, y le propinaron golpes con los puños en la cara y otras partes del cuerpo.
Francisco García ha anunciado también que se va a presntar otra denuncia por parte de una cliente, que supuestamente sufrió lesiones a causa de un bote de humo que los agentes lanzaron en su asalto al interior de la taberna.
El pasado domingo, en la céntrica plaza de Tirso de Molina, se celebró una marcha en favor del movimiento 'okupa', a la que acudieron unas 300 personas. Al término de la manifestación, según la Delegación del Gobierno, cuando la gente aún no se había dispersado, un grupo de encapuchados que nada tenía que ver con los manifestantes coenzaron a romper lunas, atravesar coches en la calzada y realizar pintadas en paredes y contenedores.
La policía cargó contra los encapuchados, que según su versión eran unos treinta. De acuerdo con las mismas fuentes, el enfrentamiento callejero acabó con la detención de seis personas. Dos de los arrestos los efectuó la policía en la taberna de "La Grandola".
Según la versión del abogado, de los clientes y de la propietaria de la taberna, la policía entró al local y lanzó un bote de humo que cauó lesiones a una de las clientas, creando una gran confusión entre el medio centenar de personas que se encontraban allí. A continuación, los agentes, según las mismas versiones, desalojaron el local y a punta de pistola les pusieron en fila en la calle y empezaron a cachearles.
Francisco García explicó a Servimedia que la propietaria de la taberna asegura que los clientes del local eran personas que habitualmente van por allí y que, aunque algunos procedían de la manifestación, no se produjo ningún icidente hasta que no llegó la policía. Según las mismas fuentes, los agentes se excedieron con los clientes y causaron numerosos daños materiales en el interior del local.
Por su parte, fuentes de la Delegación del Gobierno señalaron a Servimedia que este organismo mantiene que la policía no lanzó ningún bote de humo en el interior del local, según confirman los testimonios de los agentes, y que éstos entraron en la taberna porque uno de los encapuchados huyó de la policía, se ocultó en el local e intntó atrancar la puerta para impedir su entrada.
Asimismo, los agentes aseguran, según las mismas fuentes, que oyeron como si explotaran petardos en el interior de la taberna antes de que ellos entraran.
Sin embargo, un portavoz de la Delegación explicó que ya se ha abierto una investigación interna para conocer la actuación policial y que tras la denuncia se profundizará en la investigación.
(SERVIMEDIA)
20 Mar 1997
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