Existe unatendencia a optimizar el diagnóstico subjetivo de salud en la mayoría de las personas de edad avanzada, sobre todo a partir de los 70 años.

La percepción del deterioro de salud, como es natural, avanza con la edad, pero a igual edad, siempre es mayor entre las mujeres la proporción que considera mala o muy mala su salud.

Respecto a la visión y la audición, según datos del estudio, arroja cifras muy reducidas de ceguera y de sordera, 3,6 por ciento en ambos, y cifras considerables con dificultadesserias de visión, 35 por ciento, y en menor cuantía de audición, 21 por ciento.

Un 25,6 por ciento necesitan ayuda para realizar actividades cotidianas. De ellos, el 6,5% necesita ayuda para levantarse de la cama o acostarse; el 7,5% para vestirse; el 6,7%, para cuidar de su aspecto físico; el 14,2%, para bañarse o ducharse; el 5,3%, para acudir al servicio; el 3,4%, para comer; el 7,4% para quedarse sólo durante la noche; el 9%, para bajar o subir escaleras; el 11,3%, para hacer tareas domésticas y e 7,8%, para andar o pasear.

La tasa de los necesitados de ayuda pasa de un cifra que ronda el 15 por ciento entre los que no alcanzan los 70 años a casi el 60 por ciento entre quienes superan los 80 años.

La edad en que la persona comienza a experimentar una dependencia acentuada de terceros marca, en el lenguaje de los expertos, el paso de la tercera a la cuarta edad.OCUPACION

Un 38,2 por ciento de los mayores se dedica a tareas del hogar; un 17,6%, es obrero sin cualificar; un 15,4%, orero cualificado; un 9,9%, oficinista, funcionario o profesional liberal; un 7,8%, asalariado agrícola; un 6,1%, autónomo; un 3,6%, pequeño propietario agrícola; un 0,3%, empresario; un 0,1%, alto personal directivo; otros, 0,6%.