El decreto introduce cambios en la normativa vigente sobre aplicación de estas ayudas, de modo que se establece como requisito que los beneficiarios sean alumnos que acudan regularmente a centros escolares reconocidos por las autoridades competentes, pertenezcan éstas a los ayuntamientos o a las consejerías de las comunidades autónomas.

Queda suprimido así la obligación de que los centros estén autorizados únicamente por autoridades competentes en materia de educación, como s recogía en la normativa que hoy se modifica, ya que en algunas comunidades autónomas los centros están autorizados por consejerías como la de Asuntos Sociales, dependiendo en otras de los ayuntamientos la escolarización de los niños durante el ciclo de educación infantil.

Esta modificación permitirá, por tanto, ampliar el número de centros que pueden optar a estas ayudas, de las que se beneficiarán tanto los jardines de infancia, como los centros de enseñanza primaria y secundaria, los de Formación Pofesional de grado medio y los de Educación Especial.

Estas ayudas se otorgarán para la distribución de productos como la leche entera, semidesnatada y desnatada tratada térmicamente, así como para el yogur y los quesos frescos y fundidos.

Las ayudas se concederán para una cantidad máxima global de 0,25 litros de equivalente de leche por alumno y día, siempre que se consuma en las dependencias del establecimiento escolar, manteniéndose durante todo el curso lectivo, si bien se puede prolongar est período para aquellas guarderías y centros de educación especial que se mantuvieran abiertos durante los meses estivales.